Nervios en el TSJC por si le toca decidir cargarse o no la consulta soberanista
El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) desearía, como Bartleby, el escribiente, “no hacerlo”. En este caso, desearía no pronunciarse sobre la consulta soberanista que ha convocado el President Artur Mas para el 9 de noviembre.
Fuentes jurídicas aseguran que existe un “cierto nerviosismo” ante esa posibilidad. Y ello depende del Gobierno central.
Mas firmará el decreto de convocatoria de la consulta una vez aprobada la ley catalana de consultas. Eso se podría producir a principios de octubre. Si el Gobierno recurre la ley y la convocatoria, el organismo que deberá pronunciarse es el Tribunal Constitucional.
Decisión de Rajoy
El Gobierno central se inclina por esa posibilidad, que, de forma automática, significaría la suspensión cautelar de la consulta, y dejar a Mas definitivamente atrapado.
Pero si el Ejecutivo decide recurrir sólo la convocatoria, se trataría de un asunto contencioso-administrativo, y la competencia sería del TSJC. Y los magistrados prefieren no ser ellos los que le digan a Mas que deberá guardarse la consulta en un cajón. Cosas de la proximidad geográfica y política.
Lo escribió Melville, en su cuento sobre Bartleby: I would prefer not to.