Los inversores dan la espalda a la deuda catalana
El bono autonómico se dispara por encima del 4% y alcanza máximos de dos años con el español
Primeras consecuencias tras los comicios catalanes del 27S. Los inversores reaccionan a la mayoría de escaños independentistas y dan la espalda a la deuda catalana. A primera hora del lunes, la rentabilidad exigida del bono catalán a diez años, que se emitió en 2010, se ha disparado por encima del 4% y ha ampliado su diferencial con su homónimo español a máximos de hace dos años.
La venta de los bonos se ha disparado más de 20 puntos básicos en la jornada postelectoral. Durante el viernes, el interés resistió en el 3,99%. Sin embargo, la rentabilidad ha subido durante el día de hoy hasta por encima del 4,2%.
El bono español se relaja
Por contra, el interés del bono español se relaja por debajo del 2%, cuando el anterior viernes estaba en el 2,05%. La semana pasada el diferencial con Italia se acercó a los 30 puntos básicos mientras que el 28S se estrecha hasta los 20. La victoria secesionista en escaños, pero no en votos, ha moderado las dudas de los mercados hasta, al menos, las próximas elecciones generales de diciembre.
Con ambos movimientos, la brecha entre ambos bonos se sitúa en máximos de dos años, con un diferencial de 230 puntos. Varias marcas europeas y estadounidenses ya habían apuntado que el resultado de los comicios influiría a la hora de comprar deuda española y catalana.