La familia Botet, ex accionista de Caprabo, tiene 59 millones en cuatro sicav
Sus fondos están repartidos entre cuatro sociedades de inversión con una revaloración próxima al 8% durante el primer trimestre
El empresario Pere Botet Pladevall, ex propietario de Caprabo, acumula 59 millones de euros en cuatro sociedades de inversión o sicav, cuya característica principal es su módica fiscalidad. Se titulan Kahacha Money, Sogaprim, Manespa Inversiones y Tailorend Invest.
Durante el primer trimestre de este año, el cuarteto logró una revalorización próxima al 8% respecto del cierre de 2014. La entidad que cuenta con más recursos es Kahacha, con un total de 28,9 millones, seguida de Manespa con 15 y Tailorend con 10,6 millones.
22 fondos de inversión extranjeros
Kahacha tiene colocados sus recursos principalmente en 22 fondos de inversión extranjeros. Manespa remansa prácticamente todo su peculio en emisiones de deuda corporativa, tanto de empresas españolas como extranjeras. Tailorend cuenta con 2,3 millones en renta variable nacional, 6,9 millones en renta variable foránea y el resto en fondos. Por último, Sogaprim tiene puesto un tercio de su inversión en acciones del Ibex y los dos tercios restantes en instituciones de inversión colectiva internacionales y españolas.
Las familias Carbó, Botet y Elías, más el socio minoritario La Caixa, vendieron el 75% de Caprabo en 2007 al grupo vasco Eroski por mil millones de euros. Las familias fundadoras ingresaron 850 millones por el 64%. Los Botet retuvieron un lote equivalente al 16%, que hace tres años vendieron por 200 millones. La Caixa recibió 150 millones y mantuvo un paquete del 9%, que traspasó a Eroski en 2011 por 125 millones.
Propietarios de los establecimientos
Los dueños de Caprabo endosaron a Eroski el negocio comercial y los 17.000 empleados. Pero conservaron la propiedad del medio millar de tiendas que albergan los supermercados.
La sociedad Grupo Caboel, acrónimo que toma el nombre de sus propietarios Carbó, Botet y Elías, se dedica a administrar los locales alquilados a Caprabo. El arrendamiento de los inmuebles le proporciona a Caboel unos ingresos anuales cercanos a los 40 millones y unos beneficios de 20 millones. Caboel posee unos fondos propios de 370 millones y tiene valorados sus bienes raíces en 350 millones.