El especialista Carlos Molina explica las ventajas de emprender a partir de los cincuenta
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A partir de los 50 años, conseguir un empleo duradero y adecuado a la experiencia y cualidades del demandante es una tarea complicada y desalentadora. El emprendimiento constituye una alternativa interesante y real a la tediosa tarea de buscar y encontrar trabajo por cuenta ajena a una edad en la que resulta especialmente dificultoso hacerlo
Desde que se inició la crisis, los parados de más de 45 años se han multiplicado por 4,5, representando el 40% de la población en nuestro país. «Se trata de un sector de la población especialmente vulnerable», explica Carlos Molina, CEO de 50pro, la empresa de formación en liderazgo emprendedor senior, cuyo próximo curso comienza el próximo 14 de enero. «Lo más grave», añade Molina, ·es que el 70% son desempleados de larga duración».
Desde 50pro, con más de 30 especialistas en el campo del marketing y las finanzas, proporcionan algunas claves para transformar en ventajas lo que podría parecer, a priori, una desventaja: la edad.
Experiencia
A partir de los 50, es muy probable tener a las espaldas una dilatada experiencia profesional. Muchas veces, esta se ha desarrollado en el mismo sector e, incluso, en la misma empresa. Independientemente de las razones por las que se haya producido la desvinculación con esa empresa, queda en el demandante de empleo unos conocimientos y un bagage profesional que suponen un valor en sí mismos. «Estos conocimientos se deben actualizar», indica Carlos Molina. «Con un programa adecuado y una formación, aprovechando las cualidades innatas de cada uno, es una baza muy importante a la hora de emprender».
Contactos
Estos años de vida laboral habrán proporcionado contactos en el sector que pueden ser muy útiles a la hora de emprender y sacar adelante un negocio propio. «Los contactos favorecen la confianza entre las personas», asevera Molina. «Este es un factor muy a tener en cuenta a la hora de emprender, ya que podemos transformar esa confianza en un valor de nuestro futuro negocio».
Autoconfianza
La combinación de los dos factores anteriores, que son un valor proporcionado por la edad y los años de experiencia laboral, repercuten directamente en la confianza en uno mismo y en la autoestima. «Acompañado de una formación adecuada y actualizada, y del aprovechamiento de las cualidades innatas de cada uno, esto favorece sustancialmente el emprendimiento», explica el especialista de 50pro, cuyo próximo curso presencial puede ser financiado con facilidad gracias al acuerdo alcanzado entre esta prestigiosa empresa de formación en liderazgo emprendedor para seniors y el banco Sabadell.
«El emprendimiento a partir de los cincuenta años», concluye Molina ,»cuando tan difícil es conseguir un trabajo por cuenta ajena duradero y adecuado a nuestras capacidades y expectativas, constituye pues una opción real y más que óptima a tener en cuenta y llena de satisfacciones».
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Fuente Comunicae