Cierco y Seroux, vecinos y amigos de Sitges
¿Qué tienen en común los señores Higinio Cierco, copropietario de la Banca Privada de Andorra (BPA), y François Seroux, broker francés que ha denunciado en la UDEF un presunto caso de blanqueo de capitales en Panamá?
Unos viñedos.
Durante el pasado año, Cierco y Seroux, conocidos y vecinos de Sitges (al menos durante los meses de verano) entablaron conversaciones para la compra y venta de unos terrenos de cultivo en los aledaños de Sitges. Se trata de unos viñedos propiedad de la familia Cierco. Dichos viñedos le fueron ofrecidos a Seroux. El broker, experto en el análisis de riesgos financieros, no lo vio claro y rechazó el ofrecimiento de Higinio Cierco al entender que se trataba de una compra que no iba a depararle ningún beneficio económico.
Durante los meses de verano, Cierco y Seroux coinciden a menudo en dos lugares: el primero es la iglesia del Vinyet, en la zona más noble de Sitges donde comparten eucaristía. El segundo es en el Club de Mar de Sitges, centro de reunión de la cream financiera catalana. Allí dicen que se puede ver a Cierco sentado en su sofá, recibiendo a empresarios, banqueros, intermediarios, testaferros, arribistas, financieros y políticos (o representantes de políticos), con sus respectivos maletines. A veces de piel de cocodrilo, a veces de piel sintética. A veces llenos, a veces muy llenos.
Sitges is cool. Al Tesoro norteamericano, le encanta.
