El juzgado da un mes a los Franco para vaciar Meirás
La familia tendrá un mes para la retirada “de las cosas, bienes u objetos” que hay en el interior del Pazo de Meirás
La familia Franco tendrá un mes para vaciar Meirás. El juzgado de Primera Instancia número 1 de A Coruña acordó conceder ese plazo a los herederos del dictador para la retirada “de las cosas, bienes u objetos” que hay en el interior del inmueble. Establece como única excepción aquellos que se encuentren en el inmueble por haber sido colocados por el Estado tras haber tomado posesión de la titularidad del pazo.
En la diligencia de ordenación, contra la que cabe presentar recurso de reposición, la jueza requiere al Estado que permita el acceso al edificio de los profesionales que designe la familia Franco para poder efectuar la retirada de los bienes.
La resolución atiende a la petición hecha por los familia en un escrito presentado por sus letrados este lunes después de que la Sección Tercera Audiencia Provincial de A Coruña revocase el depósito mobiliario a favor del Estado.
Dos joyas: la biblioteca de Emilia Pardo Bazán y las esculturas del Mestre Mateo
Los Franco ya han adelantado su voluntad de retirar todos, incluidos los declarados como Bien de Interés Cultural (BIC), aunque en este caso tendrían que pedir autorización a la Xunta. El conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, se mostró especialmente preocupado por las esculturas de Abraham e Isaac, atribuidas al taller del Mestre Mateo, y también por la biblioteca de Emilia Pardo Bazán, que, a su entender, son bienes de “Galicia”, por lo que la Xunta dará la batalla para que se queden en la comunidad.
Con la decisión adoptada por la Audiencia de A Coruña al estimar el recurso de la familia del dictador —que ahora deberá ser «indemnizada» por los daños y perjuicios que les haya podido ocasionar esta situación–, que dejó sin efecto el auto del Juzgado de Primera Instancia número 1 de A Coruña en el que se ordenaba depositar a favor del Estado todos los muebles y elementos accesorios del pazo de Meirás.
Los magistrados dejaron abierta, no obstante, la posibilidad de que el Estado pueda reclamar en otro pleito la titularidad de los muebles que considere Patrimonio Nacional asignados al jefe de Estado.
Respecto a la petición de la parte demandada de que se declare no existente, a todos los efectos, el inventario sobre los bienes del pazo, así como de que se prohíba su divulgación, el juzgado otorga a las partes un plazo de diez días para indicar si están conformes con esta solicitud o presenten alegaciones.