Xulio Ferreiro mirará con lupa el proyecto de ocio de Los Cantones
El gobierno municipal advierte que aplicará el "máximo rigor" para analizar el cambio de licencias de uso y las medidas de seguridad del complejo
El pasado día 15, los establecimientos que el Grupo Vips tenía en el complejo Los Cantones Village cerraron sus puertas. Se trata del primer movimiento para la reconversión del centro comercial en un macrocomplejo dedicado únicamente al ocio y a la hostelería.
Precisamente, ese cambio de usos es el que condiciona en gran medida el proyecto, ya que será necesario modificar licencias. En este sentido, a pesar de estar situado sobre terrenos portuarios, el gobierno local tiene mucho que decir, ya que es una competencia municipal. El equipo de Xulio Ferreiro asegura que aplicará el «máximo rigor» a la hora de analizar todos los aspectos de la propuesta, sobre todo, ante el recuerdo de malas experiencias pasadas, incluídas denuncias de pufos en la adjudicación y en el uso de fondos públicos durante el desarrollo del complejo.
Los promotores de la iniciativa, entre los que figuran el empresario Juan Carlos Rodríguez Cebrián, Gerardo Lorenzo y Luis Diz, aseguran haber presentado ya el proyecto, pero en el Ayuntamiento aún no han tenido tiempo de estudiarlo con detenimiento y es algo que quieren hacer, porque la complejidad del plan así lo requiere.
Caminos erráticos
Pelícano, que es como se denomina el proyecto, es una iniciativa que pretende revertir la situación de un espacio que nunca acabó de despegar y, al mismo tiempo, la mala suerte de un empresario como Juan Carlos Rodríguez Cebrián al que la fortuna no acaba de sonreír en sus inversiones inmobiliarias. Prueba de ello son sus pinchazos en empresas como Martinsa, Hábitat o Realia.
El complejo, que inició su andadura bajo la denominación El Puerto Centro de Ocio y la supervisión de la empresa Superco, cambio varias veces de empresa gestora. Todas ellas asumieron el control con la intención de reflotarlo, pero ninguna lo consiguió.
También fueron varias los problemas que han salpicado a esta instalación. Dudas en la adjudicación del concurso, denuncias por el mal uso de fondos públicos y deficiencias en la seguridad que llegaron a costar la vida de varios jóvenes son algunos de los más destacables. En este sentido, desde el Ayuntamiento ya han anunciado que serán «absolutamente rigurosos» en velar por el estricto cumplimiento de las normativas urbanísticas y de seguridad, los dos aspectos que más preocupan en María Pita.