Visitas a cementerios: solo cuatro personas convivientes y 30 minutos
La Xunta de Galicia establece un protocolo para regular las visitas a los cementerios de cara a la festividad de Difuntos en plena escalada del Covid-19
Imagen de archivo de una persona con EPI caminando por un cementerio durante la pandemia /EFE
La Xunta pone en marcha el operativo sanitaria de cara a la festividad de Todos los Santos la próxima semana. Así, la Consellería de Sanidade ha decidido limitar las visitas a los cementerios, por grupos de cuatro personas convivientes como máximo por espacios de 30 minutos.
Así lo refleja en el protocolo de Prevención de la infección por el virus SARS-CpV-2 en lo cementerios de la Comunidad Autónoma de Galicia ante la festividad de Todos los Santos y Difuntos revisado por la Comisión Clínica para la gestión de la crisis sanitaria, en el que se subraya que la duración de las visitas a los cementerios «deberá ser lo más breve posible y, en ningún caso, deberá ser superior a 30 minutos«.
Sin misas en el exterior
Asimismo, en el documento se subraya que «la situación epidemiológica actual imposibilita la realización de misas de campaña –-en el exterior– en los cementerios» gallegos.
Entre otros aspectos, Sanidade recomienda «ampliar los horarios de apertura de los cementerios con el fin de espaciar las visitas y evitar aglomeraciones», fundamentalmente «en los casos que se proceda al adecentamiento de los nichos o tumbas por parte de los familiares». Al respecto, se aconseja fomentar esta actividad «en los días previos al 1 y 2 de noviembre».
Sobre la ocupación, se insiste en «respetar un aforo máximo de una persona por cada cuatro metros cuadrados de espacios computable de superficie del recinto», para lo que indica se establezca «un sistema para su control».
Puerta de entrada y salida
«Este sistema de control deberá evitar el agrupamiento de distintos grupos de visitas y permitir mantener el distanciamiento interpersonal en los puntos de entrada del recinto», concreta el protocolo.
Sanidade destaca en el texto relativo a las medidas organizativas que se debe «organizar la circulación de personas dentro del cementerio estableciendo circuitos diferenciados de entrada y salida al mismo«. «De ser posible se indicará una puerta de entrada y otra diferente de salida», concreta. Y de existir aparcamiento, «se organizará evitando las aglomeraciones de personas en el mismo».
En el caso de haber aseos, se concreta en el documento que su ocupación máxima «será de una persona para espacios de hasta cuatro metros cuadrados, salvo en los supuestos de personas que puedan precisar asistencia». En este caso se permitirá la utilización de su acompañante.
Limpieza y desinfección
En cuanto a las medidas de limpieza y desinfección, se establece una pauta para las superficies que puedan ser objeto de contacto de las manos de los visitantes –barandillas, escaleras, fuentes y otras–. Por un lado, señala el texto que los aseos deberán contar con dispensador de jabón y papel de secado, «asegurando la reposición de consumibles en todo momento», y papelera con apertura de accionamiento no manual y doble bolsa en el interior.
«En todo caso se evitarán las toallas no desechables, incluso las de uso individual», puntualiza el documento, que señala que los aseos se limpiará y desinfectarán «al menos dos veces por jornada, aumentando la periodicidad de ser necesario».
También se garantizará la «existencia de un número adecuado de contenedores para depositar los residuos generados» –flores, botellas y otros–, que «deberán estar abiertos o dotados de pedal de apertura». Con el fin de evitar aglomeraciones, los contenedores «estarán lo suficientemente espacios», abunda el protocolo.
Sobre las medidas de protección personal, tanto por parte de los trabajadores como de los ciudadanos que acudan a los cementerios, en el protocolo se subraya que «se evitará el contacto físico» y se cumplirá la distancia de seguridad interpersonal de al menos 1,5 metros.
