Villares: «Nadie entendería» la ruptura de En Marea
El portavoz de En Marea asegura que tienen el mandato de “fortalecer el proyecto” y pide a los críticos que escuchen a las bases
Un críptico “no lo sé” de Xulio Ferreiro y un amenazante “periodo de reflexión” abierto por el sector crítico sobre el futuro de En Marea alertan sobre el riesgo de escisión que atraviesa el espacio político impulsado por Anova, Esquerda Unida y Podemos Galicia. Esas manifestaciones, sumadas a dos años de continuas disputas internas, han llenado de incertidumbre la continuidad de la que, a día de hoy, es la primera fuerza de la oposición en Galicia.
Luis Villares, ganador de las primarias del partido instrumental y blanco de las iras de los críticos, ha pedido a este sector que “escuche” el mandato de los inscritos. Y este mandato es, a su juicio, “fortalecer un proyecto político grande, no una suma de siglas«. Las declaraciones de Villares se producen el mismo día que Xulio Ferreiro, alcalde de A Coruña, dijo respetar los resultados del proceso interno pero desconocer si él y los regidores de Santiago y Ferrol se desvincularán de En Marea. “Tengo la cabeza aquí metida, en el Ayuntamiento de A Coruña», zanjó.
También Martiño Noriega puso de manifiesto el alejamiento de Compostela Aberta respecto a En Marea. El regidor compostelano afirmó que les toca «hibernar» de un espacio político a nivel gallego que ve alejado del «proyecto original» de la llamada unidad popular, que cree ahora centrado en «lecturas de parte». «No es un drama, pero es una línea diferente a la que se marca desde 2012», resolvió.
Villares asegura que “nadie entendería” la ruptura
La tesis de Villares es diferente. El portavoz de En Marea instó a los críticos a abrir un período de «reflexión». «El camino es la unidad para fortalecer aquello que tenemos en común. La gente premió que trabajásemos conjuntamente, que aparcásemos las diferencias. Nadie entendería que en nombre de las diferencias se produjesen proyectos políticos diferentes. Eso es lo que la gente premió electoralmente», insistió.
En esta misma línea, pidió a los integrantes de la confluencia que aparcasen los debates internos para «hablar ya mismo de los problemas de la gente». «Es el momento de trabajar, de dejar de enredar para que avancen los proyectos municipales, no solo en las tres ciudades (A Coruña, Santiago y Ferrol), sino en los más de 30 municipios del país donde gobernamos», concluyó.