La Xunta pide explicaciones al Gobierno: «Los embalses del Miño-Sil son los séptimos con menos reservas de España»

La conselleira de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda, Ángeles Vázquez, ha incidido en que el impacto ambiental resultante del bajo nivel de ocupación de los embalses dependerá del tiempo

La conselleira, en el embalse de Belesar / XUNTA

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La conselleira de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda, Ángeles Vázquez, ha exigido al Gobierno central que ejerza «una labor de vigilancia» y que «adopte las medidas oportunas» para evitar que el nivel de ocupación de los embalses de la zona del Miño-Sil continúen en descenso. Vázquez ha criticado que estas infraestructuras hidroeléctricas sean las séptimas con menos reservas de España, y ha pedido explicaciones al respecto.

«En el caso concreto de Belesar, Salas, As Portas y Cenza, la ocupación actualmente no llega ni al 30%, por o que el Gobierno autonómico, en el marco de sus competencias ambientales, extremará también la vigilancia y continuará con las inspecciones periódicas para detectar o prever con rapidez posibles daños sobre la biodiversidad», ha incidido Vázquez tras visitar el embalse de Belesar este martes.

La conselleira quiso recordar que la demarcación hidrográfica Miño-Sil es de titularidad estatal, y por tanto recae en el Gobierno central la responsabilidad de mantener los caudales mínimos y el control del cumplimiento de los mismos por parte de las empresas hidroeléctricas que explotan estos recursos. «Alguien tiene que explicar por qué se autorizan estos vaciados, cuáles son los motivos, cuál es el objetivo y quién se está lucrando de todo eso. Desde luego, no es la ciudadanía», remarcó.

Peligro ante una eventual sequía

Tras incidir en la petición de explicaciones al presidente de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil sobre los vaciados, la conselleira ha querido advertir acerca del peligro que supone la situación ante una eventual sequía. Así, se ha apoyado en que MeteoGalicia apunta a que habrá un final de agosto seco y un período de principios de otoño dentro de la normalidad, lo que «podría complicar la situación ya que históricamente la lluvia de otoño tiene una influencia crítica sobre los embalses».

«Dependeremos del tiempo durante los meses de septiembre y octubre para poder garantizar tanto el suministro como la preservación de los valores naturales y piscícolas», añadió Vázquez.

Economía Digital Galicia

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