Un juzgado abre diligencias contra la directora de la residencia de DomusVi en Chantada
La investigación parte de una denuncia de la Federación Galega de Familiares de Residencias de Galicia por supuestas “agresiones y amenazas” a un usuario. La compañía niega los hechos
Un juzgado ha abierto diligencias contra la directora de la residencia DomusVi en Chantada (Lugo) a raíz de una denuncia presentada ante la Guardia Civil por el presidente de la Federación Galega de Asociacións de Familiares e Usuarias de Residencias de Galicia (REDE), Paulino Campos, por supuesta «agresión, amenazas y coacciones» a uno de los usuarios.
En concreto, según confirman fuentes judiciales, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Chantada emitió el miércoles una resolución a través de la cual «ha iniciado el procedimiento penal para la investigación de los hechos» recogidos en la denuncia, una vez recibido el atestado por parte del Instituto Armado.
Esta denuncia fue interpuesta el sábado 15 de mayo por el presidente de REDE —en calidad de «amigo» del anciano supuestamente agredido— y por otra persona por unos hechos que la empresa niega.
Los hechos denunciados
Según consta en el escrito de denuncia, el primero de los episodios relatados data del pasado 7 de mayo, cuando la directora del centro entró en la habitación de este usuario «con un tono de voz muy alto, exaltado y agitado«.
De hecho, según la denuncia, la directora le reprochaba haberse «comunicado con el exterior» para denunciar que los 200 mayores de la residencia llevaban días «en confinamiento ilegal» por un brote de covid que afectaba a menos de una decena de personas y del que ahora ya no quedan casos.
Así pues, en ese momento, el anciano fue «empujado y arrinconado contra la pared» por la directora «en un claro acto de agresión física«, mientras él le instó a «terminar inmediatamente la acción violenta y a que se pusiera a una distancia mínima de un metro como corresponde a las medidas de seguridad y prevención» ante la covid.
Según la denuncia del presidente de REDE, las 200 personas que viven en DomusVi Chantada «fueron liberadas del confinamiento» al día siguiente, cuando el supuestamente agredido «tenía la intención de denunciar» los hechos ante la Guardia Civil, algo que «no pudo llevar a cabo por los impedimentos mostrados por la residencia para poder salir de sus instalaciones».
Teléfono inutilizado
A mayores, el escrito presentado señala cómo el pasado miércoles, 12 de mayo, a este usuario «le fue inutilizado (bloqueado) el teléfono«. Así, tuvo que pedirle el terminal a un compañero del centro para llamar a Paulino Campos, a quien le aseguró que sus hijos «habían decidido bloquearle el teléfono a petición de la directora de DomusVi Chantada con amenazas y coacciones», al tiempo que solicitaba «ayuda» para que el supuesto episodio de agresiones fuese puesto en conocimiento de la Guardia Civil.
Asimismo, la denuncia asegura que este usuario, que confesó estar dispuesto a llegar «hasta donde haga falta» para esclarecer los hechos, ya había sido agredido en otra ocasión «por un residente con las facultades perturbadas» sin que la dirección del geriátrico «tomase medidas preventivas» posteriormente.
«Por todo esto, se siente amenazado y perseguido, por lo que solicita la acción de la justicia, así como que se abra la posibilidad de un traslado de residencia en vista de los acontecimientos violentos recurrentes contra él y las libertades fundamentales (entre ellas las de libertad de expresión) por las que debería estar amparado», concluye el escrito.
DomusVi niega los hechos
Tras la presentación de la denuncia ante la Guardia Civil y la apertura de diligencias, DomusVi ha emitido un comunicado en el que asegura que los hechos de los que se le acusa a Petri Rodríguez, la directora del centro, «son totalmente infundados, distorsionados y no responden a la realidad». «DomusVi Chantada y todo su equipo de dirección se reafirma en su postura y condena por completo el uso indebido de información no veraz en beneficio de terceros», recalca.
Además, la compañía destaca que «cuenta con el total apoyo» de los familiares del usuario supuestamente agredido, ya que no están de acuerdo con la interposición de esta denuncia y «no dudan de la buena gestión realizada por parte de los empleados y la propia dirección» –versa el comunicado–.
Acciones legales
No en vano, DomusVi avanza que valorará emprender acciones legales frente a «las graves calumnias que ponen en entredicho la ética profesional» de la directora del centro de Chantada, quien de hecho «está a disposición de cualquier investigación que se lleve a cabo en torno a dichas acusaciones, con el fin de defender su inocencia».
La empresa también asegura que durante el brote de covid, superado hace casi una semana, «únicamente los residentes y empleados positivos estuvieron confinados en sus habitaciones y domicilios«. Asimismo, niega haber requisado el teléfono móvil u ordenador «de ningún residente», por lo que insiste en la falsedad de las acusaciones que relata la denuncia.
En cualquier caso, el juzgado ha abierto diligencias para iniciar la investigación de los hechos, después de haber recibido el atestado con las declaraciones tomadas a los implicados y a la familia por parte de la Guardia Civil.