El sobrino de Manuel Fraga reconoce que cobró de la ‘caja B’ del PP
Luis Fraga, ex senador y sobrino de Manuel Fraga, asegura que recibió dinero de la 'caja B' del PP para sufragar sus campañas y que prestó también a Bárcenas
En los “papeles de Génova”. Ahí es donde asegura el ex senador del PP Luis Fraga, sobrino del fundador y ex presidente de la Xunta Manuel Fraga, que están reflejados los 9.000 euros que cobró de la ‘caja B’ del Partido Popular y que empleó para financiar sus campañas de 2004 y 2008 para el Senado.
Fraga, que este martes se sentó en el banquillo de la Audiencia Nacional, donde se juzga a los 37 acusados por su presunta participación en la primera época de actividades de la trama Gürtel (1999-2005) ya había reconocido estos pagos durante la instrucción de la causa ante el juez Pablo Ruz. En esta ocasión, también ha explicado que el dinero que pidió “directamente” a Luis Bárcenas se entregó a las sedes provinciales para sufragar los gastos de las campañas, pero que tanto Bárcenas como Lapuerta tomaron apuntes de lo entregado.
Las cuentas en Suiza
Luis Fraga, que desde el primer momento se prestó a colaborar con la justicia, también apuntó que entre 1983 y 1989 hizo negocios con su “mejor amigo” Luis Bárcenas, con quien afirmó estar “a las duras y a las maduras”, pero que decidió dejar tras ser nombrado senador. En este sentido, indicó que Bárcenas tuvo poderes en sus centas en Suiza mientras él se “dedicaba a la política”.
Preguntado por transferencias desde su cuenta a la de Bárcenas a nombre de la Fundación Sinequanon, Fraga explicó que se trata de un préstamo que le hizo el extesorero en el año 1995 de una cantidad «importante» que se fue «engrosando» en los años siguientes. Esta cantidad –que Luis Bárcenas apuntó en «un papel»– de «entre unos 15 y 20 millones de pesetas» fue devolviéndola con unos «intereses muy por debajo del precio de mercado» a partir de 2006 gracias a que comenzó a vender acciones en bolsa.
Sobre sus ingresos en el extranjero, Fraga ha aseverado que no los declaró ni en el Senado, ni en la Hacienda española hasta 2012 porque no lo «veía necesario» ni tenía «obligación» de hacerlo. Es más, ha afirmado que sólo informó a un gestor de uno de los bancos suizos de su condición de senador y ha restado importancia al no haber informado de su posición política: «Como si digo que soy médico», ha ironizado.