Rueda se aferra a Feijóo para frenar el auge de Pontón y Formoso en las municipales

El PP gallego saca pecho por la victoria de Moreno Bonilla en Andalucía, pero reconoce que las municipales, dentro de un año, “son las elecciones más difíciles de todas”. Unos comicios en los que parte en clara desventaja frente a la hegemonía del bloque de izquierdas en las ciudades

Valentín González Formoso, Alfonso Rueda y Ana Pontón

El PP gallego saca pecho por la victoria de Moreno Bonilla en Andalucía y encara unas municipales con el PSOE y el BNG fuertes en las encuestas. Ilustración: Ilona Rey

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“Las municipales son las elecciones más difíciles de todas”. Son palabras del presidente de la Xunta y del PP gallego, Alfonso Rueda, pronunciadas este lunes, antes de la celebración del comité de dirección del partido. Un cónclave en el que la formación ha sacado pecho de los históricos resultados alcanzados por Juan Manuel Moreno Bonilla en Andalucía y ha tratado de vender estos comicios, así como el ascenso de Núñez Feijóo en Madrid, como un aval de cara a las locales que se celebrarán dentro de un año.

Sobre el papel, y si efectivamente se consolida ese cambio de ciclo que predica el PP, la carrera de Núñez Feijóo en Madrid puede beneficiar a los de Alfonso Rueda en Galicia, pero también es cierto que resta todavía un año para la cita con las urnas y que su formación parte en clara desventaja en unas encuestas que, al menos hasta ahora, evidencian la hegemonía del PSdeG y el BNG en las ciudades gallegas. «La única certeza cuando hablamos de pactos es que socialistas y nacionalistas pactarán siempre que tengan la más mínima ocasión», insistía Rueda la pasada jornada, sabedor de la necesidad (y dificultad) de amarrar mayorías absolutas

La dificultad de regresar a 2011

El mapa municipal gallego se le resiste desde 2011 al PP, a pesar incluso de las mayorías absolutas encadenadas por Feijóo en las autonómicas. De hecho, en la última cita, en 2019, no alcanzaron ninguna de las siete grandes ciudades y consiguieron solo gobernar su histórica Diputación de Ourense, en manos de Manuel Baltar, aunque sin mayoría absoluta.

También este lunes Paula Prado, la nueva secretaria general del PPdeG, se manifestó al respecto, indicando que el objetivo “como mínimo” era igualar los resultados municipales del 2011, cuando consiguieron el bastón de mando en cuatro ciudades, Ferrol, A Coruña, Santiago y Ourense, y tres diputaciones: A Coruña, Pontevedra y Ourense.

La quiniela del PP

A pesar de esperar que el efecto Feijóo, si cristaliza, se convierta en un impulso en los comicios municipales, la situación de partida no es sencilla. Según ha podido saber Economía Digital Galicia, las últimas encuestas internas de los populares gallegos apuntan a que sería posible recuperar la alcaldía de Ourense, siendo el hipotético candidato el exalcalde Manuel Cabezas, así como la de Ferrol, donde, salvo sorpresa, José Manuel Rey Varela se perfila como cabeza de cartel. Distintas fuentes aseguran que el partido también ve opciones en la ciudad de A Coruña aunque lo cierto es que las encuestas publicadas hasta el momento vaticinan que tanto el PSOE de Inés Rey como el BNG de Francisco Jorquera aumentarán su representación y sus concejales.

Si bien con la Alcaldía de Ourense, el PP retendría sin problemas la diputación de Manuel Baltar, la fortaleza de PSdeG y BNG en las provincias de A Coruña y en Pontevedra hacen muy difícil que pueda haber cambios, si bien los populares aspiran a tener opciones para recuperar el ente provincial lucense.

Cabezas de cartel, antes de agosto

En cualquier caso, y partiendo de la dificultad aritmética de regresar a las cifras de 2011, una recuperación del PP en las ciudades gallegas, aunque menor, se traduciría en una inyección de confianza para Rueda, que al año siguiente tendrá que presentarse a unas autonómicas tras cuatro legislaturas de mayoría absoluta de Feijóo, con un BNG que lleva al alza desde 2019 y un PSdeG reunificado con el nuevo liderazgo de Valentín González Formoso, presidente de la Diputación de A Coruña.

Ante este hecho, y teniendo en cuenta que los actuales alcaldes y alcaldesas socialistas y nacionalistas repetirán candidatura (Miguel Anxo Fernández Lores, del BNG, fue el último en anunciar que tratará de alcanzar su séptimo mandato consecutivo en Pontevedra), el PP quiere acelerar la presentación de sus cabezas de lista. Así lo dijo Rueda este lunes. Los cabezas de cartel se irán desvelando “paulatinamente” en los próximos meses pero los de las ciudades se darán a conocer “antes del mes de agosto”.

Yolanda Díaz y su proceso de escucha

En el escenario municipal quedan aún muchas incógnitas al margen de la situación de PP, PSOE y BNG que también podrían influir en el reparto de las ciudades. El pasado fin de semana, Podemos Galicia reunió a su militancia en unas jornadas en Lalín que, según indicaron, eran el pistoletazo de salida hacia las próximas municipales. Su líder, Antón Gómez Reino, mostró su “total sintonía” con el proyecto de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, a punto de iniciar su “proceso de escucha” en todo el país.

Al margen, al menos por ahora, también se mantienen las candidaturas municipalistas que irrumpieron en 2015 logrando las alcaldías de Ferrol, Santiago de Compostela y A Coruña, además de un peso importante por todo el país, pero que se desinflaron en 2019.

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