Rueda: “El PSdeG usa el canon del agua para desviar la atención de sus evidentes problemas internos”
El presidente de la Xunta considera que el “ultimátum” lanzado por los socialistas para abordar con los municipios el canon del agua responde a un intento de esconder que “a día de hoy no aparece nadie que quiera ser candidato” en las primarias del 17 de septiembre
Alfonso Rueda responde al «ultimátum» lanzado este martes por el PSdeG para abordar con los municipios el canon del agua y señala que se trata de una estrategia para “desviar la atención” de sus “evidentes problemas internos”.
El presidente de la Xunta critica que los socialistas gallegos hayan convocado primarias y tan solo se sabe «en estas últimas semanas todos los que no querrían ser candidatos». «Parece ser que a día de hoy no aparece nadie que quiera ser candidato», ha apuntado a lo que agrega que «es muy sintomático y muy curioso».
El mandatario gallego ha remarcado que «cada ayuntamiento puede fijar el recibo de agua que estime oportuno». «Por lo tanto, hay muchos elementos para fijarlo, no solo un elemento concreto que es del que hablaban ayer los representantes socialistas», apunta.
«En todo caso, me hace mucha gracia que intenten achacarlo a un elemento concreto cuando saben de sobra», dice sobre los socialistas, que «hay una serie de costes, empezando por los costes energéticos, que condiciona muchísimo el recibo que al final perciben los ciudadanos».
«Ignorar esto y querer cargarlo todo a un elemento concreto que además no es verdad, es no tener las ganas de solucionar el problema y en pleno verano pues, en fin, a ver si se saca algún tema que desvíe la atención probablemente de los de los evidentes problemas internos que tiene el Partido Socialista en Galicia», recrimina el titular del Ejecutivo autonómico.
Ultimátum del PSdeG
El secretario de Organización del PSdeG, José Manuel Lage, lanzó un «ultimátum» a la Xunta para que se reúna de forma urgente con los municipios para abordar la «tropelía» del canon del agua que «estrangula» a los ayuntamientos, en lo que supone una «última llamada» al diálogo para buscar una solución antes de optar por la «confrontación», «sin descartar que se llegue a una vía de carácter judicial».