Rueda abre la puerta a la tasa turística que quiere implantar Santiago

La Xunta abre la puerta a que Santiago implante una tasa turística, un debate que procede de la etapa de Martiño Noriega como alcalde de la capital gallega y que ahora parece desatascarse con Sánchez Bugallo en Raxoi y Alfonso Rueda en San Caetano. El presidente de la Xunta, que se reunió este viernes con el regidor, puso como condiciones que sea una tasa voluntaria para aquellos ayuntamientos que la deseen implantar y que cada uno cuente con la «habilitación legal» del Parlamento de Galicia.

Rueda conminó a Sánchez Bugallo a presentar una propuesta con el compromiso de que la estudiará. Concretamente, señaló que el Gobierno municipal debe «cerrar la propuesta» y detallar en «qué consistiría, qué importe tendría y a quién afectaría». «Si es una propuesta razonable» se compromete a consdierarla.

En caso de acuerdo, la tasa turística tendría que establecerse «mediante una ley en el Parlamento de Galicia a iniciativa de la Xunta». En todo caso, Rueda ha sostenido que «no sería una tasa de extensión general», sino que «habilitaría a cada ayuntamiento que la proponga para establecer esa tasa en su ayuntamiento sin que afecte a otros«. «A día de hoy, solo el Ayuntamiento de Santiago la ha propuesto», sentenció.

Bugallo pide «dos o tres meses»

Por su parte, Bugallo ha asegurado que espera poder llevar a la próxima reunión del Consello da Capitalidade una propuesta «lo más cerrada posible», algo que ha estimado tardarán en articular «dos o tres meses». El alcalde compostelano ha destacado también que coincide «plenamente» con Rueda en que la tasa turística «tiene que ser voluntaria». «Los que consideren que la deben aplicar, la aplican, y los que no, no; y, al mismo tiempo, que se establezcan unos límites para que los que decidamos aplicarla nos movamos en esos márgenes», ha argumentado.

El encuentro ha durado casi dos horas y se enmarca en la ronda de reuniones del presidente de la Xunta con regidores de las urbes gallegas. Bugallo la calificó de «extensa, intensa y franca» y Alfonso Rueda la valoró también positivamente, señalando que fue una reunión «larga, cordial y hablando las cosas claras».

Las viviendas de uso turístico

El otro tema de conflicto entre el Concello y la Xunta estaba en la legalidad de las viviendas de uso turístico en la capital gallega. Rueda ha insistido en que la Xunta procede «solo en las que haya sentencia» y, en este sentido, ha asegurado que por ahora se conocen «unas ocho sentencias». En caso de ser «muchas más», ha continuado, «habría que hacer otro planteamiento». «Nos dicen que este es el proceder. Las que están afectadas por sentencia no tienen ninguna duda y las otras en principio permanecen en vigor», ha remarcado el presidente de la Xunta.

Bugallo ha reconocido que en este tema «no hay acuerdo pleno», ya que ahora se está viendo «una cascada de sentencias». Por eso, ha dicho esperar que «en cuanto haya 20 o 30 sentencias», la Xunta entienda que ya no se trata de «un problema de sentencias puntuales», sino ante «un criterio general que establece el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia». En esta misma línea, ha asegurado que en cuanto haya más sentencias «en lugar de una comunicación, se procederá a hacer un requerimiento» y, en ese momento, ha añadido, espera que «la asesoría jurídica de la Xunta reevalue esa posición, el tema se pueda recurrir y no haya que recurrir al amparo».