Portugal se estanca, sin crecimiento de su PIB entre abril y junio
La desaceleración de las exportaciones explica en gran medida el crecimiento nulo del PIB luso en el segundo trimestre
Luz amarilla para la economía portuguesa. El PIB luso se estancó en el segundo trimestre (0,0%), frente al 1,6% que había avanzado en el primer trimestre, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), que apunta como principal motivo una desaceleración de las exportaciones. En tasa interanual, el crecimiento cerró el período abril-junio con un avance del 2,3%, dos décimas menos que el acumulado en el primer trimestre.
El INE explica que “la contribución positiva de la demanda externa” cayó hasta los 1,4 puntos porcentuales, frente a los 2,4 puntos que aportó el trimestre anterior, con una desaceleración de las exportaciones de bienes y servicios en volumen “más acentuada” que en la de las importaciones. En síntesis, Portugal pasó de un crecimiento interanual en las exportaciones del 10,1% en el primer trimestre a uno del 4,3% en el segundo trimestre, mientras que las importaciones desaceleraron al 1,3% (4,5% en el periodo anterior).
La clave de la demanda externa
La contribución positiva de la demanda interna a la variación interanual del PIB pasó de la décima porcentual en el primer trimestre de 2023 al punto porcentual, por “una reducción menos pronunciada de la inversión y una ligera desaceleración del consumo privado”.
La aportación de la demanda externa líquida a la variación del PIB fue negativa en el segundo trimestre (en 4 décimas porcentuales) por la disminución de las exportaciones, tras los 2,3 puntos porcentuales registrados entre enero y marzo.
Escalada de la inflación
Por otro lado, la inflación en Portugal subió al 3,7% interanual en agosto, seis décimas porcentuales por encima de lo registrado en julio, según datos preliminares del Instituto Nacional de Estadística (INE) luso, que reflejan el primer repunte tras nueve meses consecutivos de caída. La entidad precisó este jueves en un informe que esta aceleración “queda esencialmente explicada por el aumento de los precios registrado en los combustibles”.
La inflación subyacente (excluyendo productos alimentarios no transformados y energéticos) se situó en el 4,5%, dos décimas porcentuales menos que en el mes anterior. La variación media de los últimos 12 meses es del 6,8 % (7,3 % en el mes anterior), según la misma fuente.