¿Por qué Mas puede renunciar a la presidencia esta noche?
Esquerra Republicana califica de "fraude democrático" la última propuesta del President para formar un gobierno de concentración aunque no haya acuerdo con la CUP
La presión es enorme. Ahora no únicamente de la CUP. El debate también se ha producido en el seno de Junts pel Sí, con Esquerra Republicana planteando, seriamente, que Artur Mas renuncie a ser el candidato a la Presidencia de la Generalitat.
En la reunión de la candidatura en la que se integró Convergència y ERC ha surgido esa posibilidad. Horas más tarde, en un encuentro con la CUP, que se prolonga durante la tarde de este jueves, el debate sigue embarrancado en los mismos términos: sí o no a Mas.
El tiempo se esfuma. El último día para la investidura de Mas sería este domingo. El president debe firmar el decreto de convocatoria de elecciones este lunes, si no se llega a ningún acuerdo.
La última propuesta de Mas
En esa tesitura, y viendo que no le queda otra salida –la otra es retirarse– Mas ha ofrecido la posiblidad de constituir un gobierno de coalición con Esquerra, y otros miembros de Junts pel Sí, aunque no se produzca al acuerdo con la CUP. Se trataría de un gobierno de concentración hasta las elecciones de marzo.
Pero la reacción ha sido concluyente. Nada de nada. Para Esquerra ese pacto constituiría «un fraude democrático, que estaría fuera de la ley». Según los diputados de ERC, «acometer una crisis de gobierno en funciones para constituir un gobierno de siete semanas, sin mayoría parlamentaria y sin presidente investido no tendría sentido».
Pistas en TV3
Las alternativas, por tanto, se van desvaneciendo. De forma paralela, la presión de miembros de ERC, de la CUP, y las dudas que se han generado en dirigentes y diputados de Convergència, pueden llevar a Mas a situarse a un lado. De ello, ofrecería pistas el President en la entrevista que mantendrá en la noche de este jueves en el programa .Cat de TV3 que conduce Xavi Coral.
El argumento del soberanismo es claro: «sólo si existe un Govern fuerte en Cataluña se puede mantener el pulso con el Gobierno español, el que está en funciones o el que surja de unas nuevas elecciones generales», apuntan fuentes nacionalistas. En caso contrario, se considera que el proceso soberanista está muerto durante un tiempo, porque en unos nuevos comicios catalanes la incertidumbre es ahora total, y se da por seguro que Junts pel Sí no repetiría la experiencia.
Vital para la supervivencia de CDC
En el caso de que Mas claudique ante toda esa presión, el problema llegará un segundo después, sobre la figura que le debe substituir: ¿Raül Romeva, Neus Munté o el propio Oriol Junqueras? Para la CUP los tres candidatos serían válidos.
La importancia para Convergència es grande. Aunque sin Mas, el grupo de Junts pel Sí seguiría teniendo 30 diputados, y desde esa posición, formando parte del nuevo Govern, se podría refundar el partido.
Si Convergència camina hacia unas nuevas elecciones, se podría encontrar en la oposición, con un gobierno de izquierdas, formado por ERC, la candidatura de izquierdas en la que se integre Podemos y con el apoyo de la CUP, incluso del PSC.
Esa es la situación. Las dudas son grandes en estos momentos en el Palau de la Generalitat, a sólo tres días de que suene la campana.