Pedro Sánchez rechaza una gran coalición con el PP tras las generales
Trata de desmarcarse de la operación de Cospedal, que apela a la responsabilidad de los socialistas si nadie consigue mayoría absoluta
El PSOE está atrapado en una situación muy complicada. Su secretario general, Pedro Sánchez, desea llegar a acuerdos «concretos» con el PP, pero rechaza una gran coalición si, tras las elecciones, ninguna fuerza política obtiene la mayoría absoluta.
Por un lado, el PSOE quiere aparecer como un partido de gobierno, con un largo legado a sus espaldas, pero por otro necesita aparecer como una alternativa fresca que pueda competir con Podemos. Y en ese dilema, Pedro Sánchez ha asegurado este miércoles que «gran coalición no habrá», pero que sí reclamará «pactos en beneficio de los ciudadanos».
El PP reclama estabilidad parlamentaria
Sánchez se ha visto condicionado por la estrategia de la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que ha apostado por el PSOE para lograr «acuerdos de estabilidad» si nadie consigue la mayoría absoluta.
Cospedal parte de un punto de partida muy claro: que el PP ganará las próximas elecciones generales, y que, sin mayoría absoluta, invitaría al PSOE a formar parte de un gobierno de coalición.
Sánchez propone pactos concretos en diferentes ámbitos
Pero el PSOE no puede seguir, todavía, esa estela. Quiere competir. Y Pedro Sánchez considera que puede ganar las elecciones, con un PP que pierde peso electoral de forma continuada como muestran las recientes encuestas.
Por ello, Sánchez ha asegurado que a Cospedal «no hay que hacerle caso». Y que el PSOE lo que hará es ofrecer cuatro grandes pactos: educativo, reforma constitucional, energético para reducir la factura de la luz, y de política de dependencia y autonomía personal.