Pedro Sánchez defiende ante el BNG una transición energética “razonable”
Néstor Rego asegura en el Congreso que el Ejecutivo “está impulsando un modelo, de nuevo como en el franquismo, en el que Galicia estará especializada en la producción de energía a gran escala”
Pedro Sánchez aborda la deriva de la transición energética a instancias del BNG. El presidente del Gobierno ha defendido que España está desplegando “una razonable estrategia de transición energética”, y ha puesto de ejemplo la última subasta de renovables, que “va a movilizar una inversión cercana a 4.000 millones” y creará 36.000 puestos de trabajo.
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, también ha comparecido en la sesión plenaria celebrada este miércoles en el Congreso de los Diputados, donde ha insistido en que espera que el tope al precio del gas pueda aprobarse este viernes “de forma simultánea en Portugal y en España”.
La respuesta de Pedro Sánchez
En su respuesta al diputado del BNG Néstor Rego, Sánchez ha recordado alguna de las iniciativas legislativas en materia de energía y clima que el Ejecutivo ha conseguido sacar adelante “a pesar de las dificultades”, como la Ley de Cambio Climático o el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC). El presidente del Gobierno ha recalcado que la calificación que ha obtenido el país por parte de las instituciones comunitarias “es de las más sobresalientes”, y ha aseverado que España está adoptando una “razonable estrategia de transición justa”.
Rego, sin embargo, le ha reprochado que apueste por un “modelo depredador que carece de planificación previa”, que podría evitarse con otro de “generación distribuida, sobre la base de la producción a menor escala, con retorno social, sin impacto ambiental, y próximo a los centros de consumo”.
Modelo franquista
En su opinión, el Ejecutivo “está impulsando un modelo, de nuevo como en el franquismo, en el que Galicia estará especializada en la producción de energía eléctrica a gran escala y, en buena medida, para el resto del Estado español”.
Por este motivo, el diputado del BNG ha reclamado una “tarifa eléctrica gallega” que beneficiaría “a ciudadanos y empresas”, al entender que “es de justicia” que si esta comunidad soporta “impactos sociales y ambientales” pueda compensarlo. “Hay proyectos que hay que poner en marcha, también a menor escala, pero los objetivos están marcados”, ha contestado Sánchez, que ha explicado que hay que “acelerar la agenda, contar con plantas renovables de mayor envergadura” así como “hacer frente al reto climático”.
Mención especial ha dedicado a las subastas de renovables, y ha recalcado que todas las empresas que se presentan tienen que remitir un plan estratégico en el que expliquen cómo compatibilizan sus proyectos “con la realidad socioeconómica del territorio”. “Sólo por dar una cifra, se estima que en la última subasta se va a movilizar una inversión cercana a los 4.000 millones de euros y una creación de 36.000 puestos de trabajo, precisamente, en el territorio”, ha concluido.
La clave del gas
La ministra Teresa Ribera se ha referido al “acuerdo político” con Bruselas, que permitirá a España y Portugal limitar el precio del gas destinado a la producción eléctrica durante doce meses, con el objetivo de aliviar la factura de los consumidores con tarifa indexada al mercado mayorista o pool.
“Venimos trabajando con los colegas portugueses en detalles técnicos que, a veces, pueden resultar un tanto complejos. Esperamos poder aprobarlo de forma simultánea este viernes”, ha explicado la vicepresidenta tercera del Gobierno. Una vez reciba la luz verde de ambos consejos de ministros, el mecanismo se remitirá “inmediatamente” a la Comisión Europea, que “debe adoptar una decisión del colegio de comisarios para hacer efectiva su aplicación”.
No obstante, ha incidido en que se trata de una “medida temporal” que “da estabilidad”, pero que “hay que trabajar en la evolución de un mercado eléctrico resistente a los desafíos del futuro”. Un extremo en el que ha coincidido la diputada del PNV Idoia Sagastizábal, que ha propuesto “reformar el mercado eléctrico, reformular la tarifa regulada o PVPC, y facilitar liquidez en el mercado a plazo”.