Ofensiva de los Franco para llevarse las estatuas del Mestre Mateo y la biblioteca de Pardo Bazán
Los herederos del dictador mueven ficha tras su última sentencia favorable y reclaman a la Xunta la retirada de las estatuas del Mestre Mateo y la biblioteca de Pardo Bazán
Los Franco mueven fichar para retirar las estatuas de Abraham e Isaac del Mestre Mateo y la biblioteca de la escritora Emilia Pardo Bazán del Pazo de Meirás. Los herederos del dictador lo han solicitado formalmente a la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural de la Xunta de Galicia, según ha confirmado este sábado el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, en declaraciones a los medios en un acto celebrado en Santiago.
Según ha defendido el titular de Cultura, el objetivo de la Xunta es hacer valer la condición de Bien de Interés Cultural (BIC) de ambos bienes (plena en el caso de las estatuas y en fase de tramitación en el de la biblioteca) para evitar que salgan de Galicia. Además, Román Rodríguez ha enfatizado en que se trata de un asunto «de gran relevancia jurídica» que debe ser abordado «con solvencia» pues supone una cuestión que escapa de «planteamientos políticos» y alcanza el ámbito de la justicia.
La ofensiva de la familia Franco se produce tras la sentencia que les permite retirar los bienes muebles del interior del Pazo de Meirás, algo a lo que el titular de Cultura se ha opuesto y ha defendido que estos bienes permanezcan en la comunidad porque ese es «el sentir mayoritario de los gallegos».
¿Blindaje como BIC?
Para ello, la vía elegida es hacer prevaler la condición de BIC con la que las estatuas del Mestre Mateo cuentan desde el año 2019, mientras que para la biblioteca de la escritora está incoado el expediente y, por tanto, la Xunta entiende que es «a todos los efectos» un bien protegido.
Patrimonio tiene ahora un plazo de tres meses para responder a la petición de los Franco. Durante ese tiempo, la Administración autonómica abrirá una ronda de contactos con «las instituciones culturales más singulares del país» para recabar informes sobre los que «asentar con solvencia una solución específica» que permita que estos bienes se mantengan entre el patrimonio gallego.
La Real Academia Galega, el Consello da Cultura y la Academia de Belas Artes son las entidades a las que recurrirála Xunta, que también recabará la opinión de «catedráticos de prestigio» para elaborar una estrategia legal que, a su juicio, tiene que ir acompañada de movimientos por parte del Gobierno central. Cultura defiende que corresponde al Estado «reclamar o iniciar una declaración BIC» para proteger el resto de bienes, por lo que ha instado a «hacer las cosas bien» en el plano jurídico para evitar «pasos atrás».