Más presión sobre Galicia: Castilla y León cierra la hostelería
Su presidente, Alfonso Fernández Mañueco, anuncia el cierre de la hostelería y centros comerciales a partir del viernes por el repunte del coronavirus
Las comunidades limítrofes con Galicia intensifican sus restricciones para hacer frente al coronavirus. Si ayer era Asturias la que solicitaba al Estado central que le autorizase un confinamiento domiciliario de 15 días, este martes es turno de Castilla y León. Su presidente, Alfonso Fernández Mañueco, ha anunciado que desde el próximo viernes y durante al menos dos semanas tanto los restaurantes como la hostelería y los centros comerciales de la comunidad permanecerán cerrados al público.
Tan solo se podrá acudir a estos establecimientos para recoger comida y llevarla a domicilio, al tiempo que quedarán suspendidas temporalmente las visitas a las residencias de mayores por un periodo de al menos 14 días desde que comience su vigencia el 6 de noviembre.
A la espera de ratificación judicial
Fernández Mañueco ha justificado la necesidad de estas medidas por el «riesgo máximo» en el que, a su juicio, se encuentra la comunidad ante el incremento de los contagios y ha pedido al Gobierno central que asuma su responsabilidad para tomar medidas que la Junta no puede dictar con el marco normativo actual. Entre ellas, el confinamiento domiciliario que ya ha demandado la Junta de Castilla y León al Ministerio de Sanidad en los últimos días y que el Gobierno central ha dejado aparcado.
Las medidas acordadas, que no afectan a aquellos establecimientos que ofrezcan bienes y servicios de primera necesidad y aquellos que tengan una superficie inferior a 2.500 metros cuadrados y cuenten con acceso directo desde la calle, están pendientes de la necesaria ratificación judicial, como ocurrió con los confinamientos perimetrales.