Mas perfila las elecciones anticipadas con Junqueras tras el ‘no’ del TC a la consulta
El President pretende encabezar 'un partido' del independentismo, si el líder de ERC acuerda una candidatura unitaria
El plano secuencia era previsible. Y se ha cumplido. El actor principal, Artur Mas, promovió una ley de consultas en el Parlament, tras la negativa del Gobierno central a traspasar a la Generalitat la competencia para celebrar referéndums, a través del artículo 150. 2 de la Constitución. Firmó el decreto de convocatoria de la consulta para el 9 de noviembre el pasado sábado. Y, poco más de 48 horas después, el foco se desplazó al Tribunal Constitucional, que este lunes decidió suspender cautelarmente, y, por un periodo máximo de cinco meses, tanto la ley como el decreto.
¿Respuesta de Mas? Buscará ganar algo de tiempo, con la presentación de alegaciones, pero perfila ya la convocatoria de unas elecciones anticipadas, formando para ello una candidatura unitaria.
Todo suspendido
La consulta del 9N, por tanto, está en estos momentos suspendida. Por unanimidad, los 12 magistrados del Constitucional, decidieron admitir a trámite los dos recursos del Ejecutivo central. Y, de forma automática, quedan en su suspenso.
Pero el Govern puede presentar alegaciones. Y lo hará. El Ejecutivo de Artur Mas desea forzar al Constitucional para que levante la suspensión de la consulta antes del 9N. Considera que el entramado jurídico de la ley y el decreto complicarán la vida al TC y que, en algún momento, autorizará el 9N.
Pero esas alegaciones tienen pocas posibilidades de prosperar, según fuentes jurídicas. Mas ganará, con ello, algunos días, aunque la suspensión del Constitucional implica dejar sin efecto cualquier acción que vaya encaminada a promocionar el 9N, como la campaña institucional en marcha.
Una respuesta conjunta
El hecho es que Mas, desde este mismo martes, debe acordar una respuesta con los partidos pro consulta. Ese fue su compromiso. Y la respuesta no puede ser otra que unas elecciones anticipadas, antes de las elecciones municipales de mayo de 2015, aunque el presidente de Esquerra, Oriol Junqueras, haga un uso abundante de la retórica y señale que sólo hay un camino: votar el 9N.
En paralelo, Mas gana tiempo, y las entidades soberanistas movilizarán a la ciudadanía. Este martes la Asamblea Nacional Catalana (ANC) ha convocado a los soberanistas a concentrarse en todas las plazas de los pueblos y ciudades. Y, para el fin de semana, ya están previstas manifestaciones y concentraciones. El caldo de cultivo se incrementará.
Una lista con mayoría absoluta
¿Qué busca con todo ello el President Mas? Fuentes nacionalistas aseguran que es el momento de Mas para poder tener la máxima fuerza y reunir, alrededor de candidatura, a partidos, asociaciones y entidades. Se trata de formalizar una candidatura única, independentista, liderada por él, con el concurso de Esquerra Republicana, y de socialistas alejados del PSC.
En esa lista podría estar, por ejemplo, desde Carme Forcadell y Muriel Casals, las líderes de la ANC y Òmnium Cultural, hasta Joaquim Nadal o Marina Geli. Esa candidatura se vería beneficiada por la Ley d’Hondt, y podría alcanzar la mayoría absoluta.
Declaración de independencia
¿Problemas? Muchos. Una de las condiciones de Oriol Junqueras para formar parte de esa lista única es que se aborde, como una de las primeras decisiones, tras los comicios, la declaración de independencia. Con esa lista, preparada para tal fin, muchos dirigentes de Convergència no participarán, y tampoco miembros de de Unió.
Lo que hagan en las próximas semanas podría ser decisivo para formar parte de otro flanco, pero, en cualquier caso, no afectará a esa candidatura, porque la mayoría de Convergència está en eso. Y una buena parte de Unió, también.
De la consulta a la independencia
La cuestión es que el escenario ha cambiado. El Gobierno central considera que, con la suspensión de la consulta, Esquerra buscará su interés particular, y rechazará esa lista única. Con un Parlament muy dividido, con ERC en primer o en segundo lugar, el Ejecutivo de Mariano Rajoy espera que el proceso soberanista baje en intensidad.
Pero lo que Mas puede plantear ahora –ERC ya lo hace abiertamente– es que sin consulta, o referéndum, se saltará de pantalla. Y la siguiente se llama declaración de independencia. Porque en las elecciones anticipadas habrá ‘un partido”, la candidatura que encabece Mas, netamente independentista.
Y si tiene la mayoría absoluta, además de contar con el previsible apoyo de los diputados de la CUP o de ICV, o lo que surja del movimiento Podemos, –Guanyem Barcelona, la plataforma que se presentará en las municipales, apoya el derecho a decidir– su fuerza será enorme.
Esto es lo que se dibujará en los próximos días. El Gobierno central cree que, con la suspensión del Constitucional, ha ganado tiempo y un posible descenso del fervor independentista. Pero en el otro lado, Mas va sumando energías.