Los sindicatos alertan: salida de la recesión sí, pero no de la crisis
Las marchas por el 1 de mayo recogen las protestas por los salarios precarios, y los contratos temporales
La crisis ha quedado atrás. Es el mensaje del Gobierno, que augura un crecimiento del PIB en 2015 cercano al 3%. Pero los sindicatos no lo ven igual.
El día del trabajador tiene otro lema: se acepta la salida de la recesión, pero no de la crisis, porque el problema, según CCOO y UGT, son los salarios precarios, que impiden una salida digna de la crisis para miles de trabajadores.
En Madrid y Barcelona esa ha sido la constante de las marchas y concentraciones de este viernes. En la capital, los líderes sindicales han protagonizado el acto central, después de que el año pasado lo hicieran en Bilbao. En total son 80 actos, entre las 68 manifestaciones y 12 concentraciones repartidas por las principales ciudades españolas.
Pacto salarial con la CEOE
Los líderes de CCOO y de UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, han asegurado que esperan cerrar en las próximas dos semanas el pacto salarial. Según Méndez, «hay coincidencia con la patronal CEOE en que se debe ultimar un acuerdo en esta materia y estamos en condiciones de hacerlo».
En Valencia ha estado el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, para reivindicar la reforma que quiere impulsar sobre el Estatuto de los trabajadores, con el que, precisamente, quiere acercarse a los sindicatos. Sánchez desea clarificar la utilización de contratos temporales, y limitarlos para aquellas situaciones y trabajos que sí los necesitan, sin extenderlos de forma abusiva a otros ámbitos.
Precariedad es explotación
En Barcelona, la tónica ha sido la misma. El grito ha sido unánime. «Precariedad es explotación, trabajo y salarios dignos», han clamado miles de personas. Y es que los sindicatos, que han sido apartados tras la reforma laboral, porque las empresas se han podido descolgar de los convenios colectivos, entienden que la salida de la crisis a través de salarios mucho más bajos acabará siendo contraproducente.
Los sindicatos entienden que se ha llegado a una situación en la que tener trabajo ya no es garantía de una vida digna, y de que se puede condenar a muchos trabajadores a la pobreza, pese a mantener sus puestos de trabajo.
Los secretarios generales en Cataluña de CCOO y UGT, Joan Carles Gallego y Josep Maria Álvarez, han pedido a los trabajadores, a los que tienen empleo y a los que están parados, que presionen en el ciclo electoral que se acerca para tratar de reorientar esas políticas salariales.
Los sindicatos buscan cómo recuperar su papel
Por tanto, los sindicatos buscan cómo influir, de nuevo, en los partidos políticos, con el objetivo de que se derogue la reforma laboral y se puedan aumentar los salarios y recuperar los servicios sociales.
De hecho, se trata de un canto para ocupar otra vez el espacio central, en un momento en el que el PSOE, precisamente, quiere contar con los sindicatos para buscar complicidades. Los sindicatos son conscientes de su papel marginal en los últimos tres años, y tratan de darle la vuelta esperando las consultas electorales que se avecinan.