Los hospitalizados se disparan y alejan el final de las restricciones
Sanidade valora si endurece las medidas en el área de Vigo y las relaja en Ourense; la presión hospitalaria invita a mantener los cierres
El comité de expertos de la Xunta se reúne este martes para decidir, entre otras cuestiones, si mantiene los cierres perimetrales decretados la pasada semana y que afectan a un 45% de la población. Ni los datos sobre la evolución del coronavirus ni las declaraciones de los responsables de Sanidade invitan a pensar que vaya a levantarse el confinamiento, si bien el Gobierno gallego ha defendido aplicar las medidas en función de la situación epidemiológica de cada zona y hay excepciones respecto a la negativa dinámica general.
Es el caso del área de Ourense, donde el número de nuevos contagios detectados ha caído drásticamente, aunque en la última jornada sufrió un nuevo repunte. Se detectaron 87 nuevos positivos y los casos activos se elevaron en 23. Aún así, desde mediados de octubre hay 300 personas menos con la infección activa en el área sanitaria.
Sobre la mesa del comité clínico está la posibilidad de relajar las restricciones en el área, que sufre medidas duras desde principios de octubre. Tanto el cierre de la capital y del municipio limítrofe de Barbadás como la prohibición de las reuniones de no convivientes se aplicaron a comienzos del mes pasado.
Vigo y Santiago, unos peor y otros mejor
En el caso contrario estaría el área de Vigo, que en los últimos datos de la Consellería de Sanidade volvió a liderar el número de nuevos infectados con 155 en un día. Los casos activos alcanzan los 2.072, situándose a la cabeza en Galicia por delante de A Coruña (1.575) y de Santiago (1.360).
En el área compostelana se ha registrado un leve descenso de los casos activos y se detectaron 55 nuevos casos. Es otra de las zonas que acumula más días con restricciones duras, como el cierre del interior de los bares o la prohibición de reuniones de no convivientes desde el 22 de octubre.
La presión hospitalaria
Al margen de los cambios que puedan producirse en estas zonas, el gran lastre de Galicia para levantar restricciones es el fuerte incremento de la presión hospitalaria. Los últimos datos de la Consellería de Sanidade registraban 77 pacientes en UCI y 446 ingresados, es decir, 523, 41 más que el día anterior.
En los últimos siete días, el número de hospitalizados se elevó en 79 y es el doble que a comienzos del mes de octubre. La alarma lanzada por Asturias, que pidió el confinamiento domiciliario precisamente ante el riesgo de saturación de la sanidad, tampoco ayuda a relajar las medidas en una época en la que el Covid-19 convive con la gripe.
Por otro lado, el comité clínico entiende que se requiere de tiempo para que las medidas adoptadas se noten a través de un descenso en el número de contagios. La otra opción dejaría el cierre de las ciudades en una medida coyuntural para evitar la movilidad hacia el rural el uno de octubre, que era también uno de los objetivos del confinamiento.