Los bares recelan del código QR a tres días de su obligatoriedad
Los hosteleros desconfían del uso que se le dé a los datos recolectados y consideran que la obligatoriedad de la medida solamente en su sector les "criminaliza"
A apenas tres días de que sea obligatorio disponer de un código QR en todos los locales de hostelería de Galicia, los dueños de los establecimientos desconfían de la medida y del tratamiento que se va a dar a los datos recolectados.
«Es totalmente discriminatorio porque solamente lo tenemos que usar nosotros, no los demás sectores. Nadie nos garantiza que los datos que se recojan ahí vayan a ser usados para fines que no tengan que ver con la pandemia, no sabemos para qué los van a usar los grupos de rastreo», critica uno de los directivos de la asociación Hostelería Compostela, Lois Lopes. «Consideramos que criminalizan el sector porque solo es obligatorio para nosotros», añade.
Beatriz Carballido, gerente de la Federación de Hostelería de Pontevedra, comparte la misma opinión: «Tenemos muchas dudas de que los datos recolectados con los códigos QR se vayan a utilizar para lo que ellos imponen». Además, Carballido resalta que la aplicación PassCovid, necesaria para que los clientes se registren, «no la usa mucha gente», así que la duda está en si realmente será de utilidad la medida. «A nosotros nos obligan y si no tenemos el código nos van a sancionar. En casos del rural o donde el cliente no tiene teléfono tenemos que tomar los datos a mano«, explica.
Rastrear brotes
Según el Diario Oficial de Galicia (DOG) del 25 de febrero de 2021, la nueva medida, que entra en vigor el día 5 de marzo, tiene como objetivo «ayudar a detectar posibles concentraciones de contagios con mayor rapidez» y aumentar la eficiencia en cuanto a la «rastreabilidad en caso de detección de casos positivos».
Sin embargo, la obligatoriedad de la medida se extiende solamente a los dueños de los establecimientos, ya que los clientes se registrarán de forma voluntaria al entrar en los locales.