Las alternativas para circular en la A-6 tardarán una semana más
El Gobierno presentará el próximo jueves 30 de junio el Plan de Movilidad elaborado para agilizar la circulación de vehículos que transitan por la autovía
El delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, ha anunciado esta mañana que el Plan de Movilidad elaborado por el Ejecutivo central para poner en marcha mejores alternativas y agilizar la circulación de los vehículos que transitan por la autovía de la A6 se presentará el próximo jueves 30 de junio.
Ese mismo día, el secretario general de Infraestructuras del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Xavier Flores, mantendrá un encuentro con la conselleira de Infraestructuras y Movilidad de la Xunta de Galicia, Ethel Vázquez, y la consejera de Movilidad y Transformación Digital de la Junta de Castilla y León, María González. El Ejecutivo ha convocado a las dos responsables autonómicas para tratar la situación del tráfico por el desplome así como para informar a ambas comunidades sobre el plan de desvíos articulado por el ministerio.
Mensaje de tranquilidad
Miñones ha insistido en su mensaje de tranquilidad puesto que «el Gobierno está poniendo todos los recursos necesarios para conocer las causas de los daños en el Viaducto de O Castro y plantear la mejor solución», a la vez que están activando las medidas temporales precisas. El delegado ha recalcado que el Gobierno está buscando alternativas «en el corto plazo y, en la medida de lo posible, agilizar el tránsito de los vehículos con opciones que eviten el paso por Pedrafita».
Por otro lado ha incidido en declaraciones a los periodistas que «en paralelo, el Gobierno continúa los trabajos para garantizar la seguridad» en la zona y que, «en cuanto se conozcan las causas, se comenzará con la solución».
El delegado se reunió esta semana con representantes de los transportistas y de las principales patronales de Galicia y les trasladó su disposición para poner en marcha las mejores soluciones posibles con el fin de proteger la competitividad del tejido empresarial frente a los perjuicios que les pueda generar el derrumbe.
Miñones ha remarcado que el estado de la A-6, como importante arteria logística, es prioritario porque «para este Gobierno son una prioridad las comunicaciones de Galicia con el resto del país».
«El Gobierno está trabajando para recuperar lo antes posible la circulación, para lo que el Ministerio de Transportes está poniendo todos los recursos, con los mejores técnicos especialistas a nivel mundial, así como las mejores empresas para acometer las actuaciones», ha subrayado.
Alternativas de la Xunta
Por su parte, el presidente del Gobierno autonómico, Alfonso Rueda, ha trasladado que su equipo trabaja en el diseño de «alternativas» para el viaducto de la A-6 derrumbado y que serán trasladadas en una reunión el próximo jueves con responsables del Ministerio de Transportes.
En la rueda de prensa posterior al Consello de este jueves, el presidente ha desvelado que esta misma mañana habló con la secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Veral, quien le trasladó «que iba a ser la encargada de coordinar las actuaciones» relacionadas con este puente que cayó el pasado 7 de junio.
En este contexto, el mandatario gallego le avanzó que le remitiría una propuesta para aportar soluciones «cuanto antes» a la conexión entre las provincias de Lugo y León. Son soluciones que «pueden ser ejecutadas en un plazo de tiempo breve y en un coste muy asumible».
«Le agradecí esta voluntad de informar pero también le insistí en que hay que ser muy ágiles en todo este asunto», ha insistido, porque para los transportistas, que ahora se ven obligados a transcurrir por la N-VI y atravesar el núcleo de Pedrafita do Cebreiro (Lugo), «la situación se está volviendo todavía más complicada».
Tres propuestas
Según informan fuentes de la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade, la Axencia Galega de Infraestruturas lleva «días trabajando» en la búsqueda de alternativas al corte de la A-6 en ambos sentidos.
La primera de las opciones propuestas por la Xunta, es la construcción de un ramal que conecte la N-VI y la A-6, de modo que se pueda volver a la autovía tras pasar el viaducto y antes de los túneles de Pedrafita, lo que implica transitar por la nacional «la mínima longitud posible».
Esta alternativa, cuyo coste se estima en 1,46 millones de euros, permitiría el tránsito de los transportes especiales y podría estar lista en un plazo de tres meses, según los cálculos de la Consellería de Infraestruturas.
La segunda solución, que costaría 150.000 euros porque emplearían carreteras ya existentes, consistiría en habilitar una «variante de Pedrafita» para que los transportes especiales circulen por ella y no atascar la N-VI en caso de avería. De acuerdo con la Xunta, evitaría el tránsito por la parte más poblada de la localidad, pero tiene la desventaja de que no aprovecha los túneles.
La tercera opción diseñada por la Consellería implicaría habilitar en doble sentido de circulación el ramal de salida de la A-6 en sentido Galicia, de modo que los vehículos se pueden reincorporar a la autovía antes de los túneles de Pedrafita. El coste, según Infraestruturas, sería «muy pequeño» y «prácticamente se podría hacer con medios de la conservación de carreteras».
Se trata de un plan de «muy sencilla ejecución», añade el departamento de Ethel Vázquez, que hará «de forma inmediata» una simulación para confirmar que los transportes especiales puedan acometer el giro. En cualquier caso, circularían por allí de madrugada, aunque ahora «no se está permitiendo, entre otras cosas, por temor a que uno de ellos quede atascado y no haya alternativa de tráfico».