La Xunta sale en defensa de la mina de Touro
La conselleira Ethel Vázquez defiende el escrupuloso cumplimiento de la ley en el complejo minero frente a las críticas de En Marea
Con el proyecto de la multinacional minera Atalaya Mining como trasfondo, En Marea y la Xunta se enzarzaron en el Parlamento por el impacto ambiental de la mina de cobre de Touro. Antón Sánchez, diputado de En Marea y líder de Anova, acusó al Gobierno gallego de ser “cómplice” de la contaminación del entorno de la explotación, que todavía preserva una mínima actividad por las extracciones de la empresa Explotaciones Gallegas. Se hacía eco el portavoz de vertidos procedentes de la balsa minera de Balma que alcanzaron un afluente del río Ulla.
La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, defendió que los informes ambientales respecto a la mina se hicieron siguiendo la más escrupulosa legalidad. En la zona de la antigua mina de cobre es donde Atalaya Mining pretende reabrir y ampliar la explotación en un gran proyecto minero en alianza con Explotaciones Gallegas que ha hecho saltar las alarmas por su posible impacto ambiental.
Por este motivo, Antón Sánchez aludió a la permisividad de la Xunta con la contaminación de la mina de Touro y con un proyecto que es “una amenaza para la vida de las personas, para la salud y para el medio ambiente”, aseguró.
La conselleira marcó diferencias entre la antigua mina y la actividad futura de Atalaya Mining, si es que logra obtener los permisos necesarios. Al respecto de esta última, Ethel Vázquez aseguró que «velarán por el cumplimiento de la ley, por la calidad de las aguas y por minimizar las afecciones al entorno«.
