La Xunta saca adelante el plan estratégico 2022-2030 sin contar con el golpe de la inflación
El plan, aprobado en el Consello en el mes de marzo, sale adelante con la oposición del BNG y el PSdeG que lo ven “obsoleto” por no contemplar la situación económica actual
El Parlamento ha aprobado este miércoles el plan estratégico de Galicia para el periodo 2022-2030, solo con los votos a favor del PPdeG y el rechazo de la oposición. BNG y PSdeG exigieron al Ejecutivo autonómico que adaptase la propuesta a la “situación económica actual”.
El plan estratégico 2022-2030 fue aprobado por el Consello el pasado 10 de marzo, con Alberto Núñez Feijóo como presidente de la Xunta. Entre las “principales prioridades” del plan se incluyó el crecimiento medio sostenido hasta 2030 de entre el 2 y el 2,5% anual y que en esta década se reduzca 4 puntos la tasa de paro, de forma que hacia el año 2030 baje hasta el entorno del 8%. Feijóo definió por entonces el plan con el “documento de país” y una “herramienta útil” para seguir en el avance.
No se puede incorporar la inflación
El pasado mes de julio, el consellerio de Facenda, Miguel Corgos, defendió que el Plan Estratéxico de Galicia 2022-2030 «no puede incorporar los efectos de los precios» porque «no se sabe» cuál va a ser el incremento de este año, aunque se incluirán «mecanismos de ajuste fino» a la hora de evaluar estos «cambios coyunturales».
Así lo indicó en la Comisión de Economía en la que compareció para presentar el plan, tras haber recibido las críticas d e la oposición por considerar que está «desactualizado» ante la evolución económica, de modo que «nace muerto».
«El tema de subida de precios es complicado recogerlo ahora. No somos autistas, somos conscientes de la realidad que nos rodea y, evidentemente, es una realidad que se agrava por momentos», apuntó Corgos.
El conselleiro reconoció que es «especialmente complejo concretar» el escenario macroeconómico debido al contexto inflacionista. «No me pidan que haga un ejercicio de adivinación», apunta, pues «ese ejercicio prospectivo es imposible de realizar». «Somos conscientes de que las circunstancias están cambiando de modo acelerado y nos adaptaremos a ello cuando tengamos la información precisa», agregó.
Críticas de la oposición
La formación que encabeza Ana Pontón, que presentó 36 propuestas de resolución, ha avanzado su voto en contra de un plan que ve «con los pies de barro» al entender que «no hace un diagnóstico realista». A juicio del parlamentario del BNG, Daniel Pérez, este plan «no es oportuno desde un punto de vista político y constituye un engaño» para la población, en opinión de su grupo. «Retírenlo, aún están a tiempo», ha reclamado. Y es que el nacionalista ha reprochado a la Xunta «no hacer una lectura realista», por lo que considera que el plan es «papel mojado».
Por su parte, el PSdeG plantó un total de 182 propuestas. La diputada del PSdeG, Begoña González Rumbo, ha lamentado que la Xunta «pudo dedicar estos siete meses a adaptar el plan estratégico a la realidad que se está viviendo», toda vez que la situación económica es «muy diferente» de la que había cuando se elaboró. Es por ello que lo ve «caducado, reseso» y falto de «vigencia».
El plan finalmente fue aprobado tras incorporar un total de 22 propuestas de resolución, seis de ellas del PSdeG y 14 transaccionadas entre los populares y los socialistas.
Las otras dos se corresponden con el grupo mayoritario y contemplan dos peticiones: la de una estrategia gallega para la economía azul (aprobada con el respaldo de PP y PSOE y en contra del BNG) y la de que la Xunta lidere la revisión de la Política Común de Pesca (a favor populares y socialistas y abstención del Bloque).
Las seis propuestas del PSOE que el PP ha apoyado han contado con el respaldo también del BNG, por lo que han salido adelante por unanimidad. Las dos primeras se refieren a impulsar medidas que avancen hacia el aprovechamiento de los metales secundarios a partir de la recuperación y del reciclaje y a eliminar los tramos de concentración de accidentes con inversiones apoyadas en criterios técnicos y de seguridad.
Las tres siguientes reclaman desarrollar los planes de ordenación de los recursos forestales, potenciar actuaciones de forestación y silvicultura e impulsar los aprovechamientos forestales en montes de gestión privada.
Por último, una de las iniciativas que incorpora el plan demanda elaborar y aprobar el primer plan de igualdade da Administración xeral da Xunta de Galicia.