La Xunta crea equipos de intervención rápida de las residencias
Encarga la misión a auxiliares de enfermería, que tendrán un plus del 19% y cinco días de descanso tras la intervención
Los centros de mayores han sido uno de los puntos críticos de la pandemia por el elevado número de contagios y mortalidad a causa del coronavirus. Desde la irrupción del Covid-19, la Xunta ha intervenido una docena de residencias debido a los casos de coronavirus y a la necesidad de incorporar personal sanitario a los centros.
Ahora, la Consellería de Política Social ha negociado con los sindicatos un protocolo para regular estas actuaciones y para la puesta en marcha de equipos de intervención rápida para atajar los brotes en las residencias.
Habrá uno en cada provincia y estará conformado por auxiliares de enfermería con la función de «actuar con la máxima velocidad y atajar el avance del virus» en una residencia intervenida por el Gobierno gallego.
Con carácter general, cada equipo estará formado por un mínimo de diez profesionales, a los que se podrá unir el personal de forma «totalmente voluntaria» y sus miembros continuarán en el puesto de origen hasta que sean llamados para esta actuación.
El acuerdo con los sindicatos supondrá, además, un complemento especial del 19%, lo que supondría unos 300 euros brutos al mes. Los descansos tras la intervención de los centros serán de cinco días, según acordaron los sindicatos con el departamento que dirige Fabiola García.
Auditoría a las residencias
La actualización de la estrategia contempla otras medidas anunciadas, recuerda Política Social, como son la frecuencia duplicada de los cribados por PCR a los trabajadores del 100% de las residencias, de forma que pasan de ser quincenales a semanales.
También se han dispuesto test de antígenos a todas las residencias, se realizarán dobles cribados –por PCR y antígenos– en una residencia por área sanitaria, se harán estudios serológicos en todos los centros, se practicará un cribado quincenal por PCR a todos los usuarios de las residencias en las que no hubo casos –las llamadas residencias blancas–, y se llevará a cabo un auditoría intensiva a lo largo de 15 días para verificar el cumplimiento de los protocolos y de las medidas de protección por parte de todas las residencias de Galicia.
Incorporación a la Ley de Salud
Para el desarrollo de este acuerdo se incluirá un nuevo artículo en la Ley de Salud, que está en proceso de reforma y que permitirá a la autoridad sanitaria competente la intervención de servicios sociales, para los casos de «riesgo inminente y grave para la salud de la población», como crisis sanitarias o epidemias.
En definitiva, habilitará a la Xunta a que «asuma o controle» la asistencia sanitaria de las personas residentes con el personal sanitario propio del centro; ordenar, por motivos de salud pública justificados, el alta, la baja, recolocación y traslado de las personas residentes a otros centros residenciales, «con independencia de su carácter público o privado». La adopción de estas medidas requerirá la colaboración «voluntaria» de las personas afectadas o, si no la hay, «la necesaria garantía judicial».