La variante Delta supone el 90% de los casos en Portugal, que baraja volver al estado de emergencia
El país, que lleva en alerta roja desde hace algo más de una semana, ha intentado frenar el avance del virus restaurando restricciones como el toque de queda
El Covid y la variante Delta continúan avanzando a pasos agigantados en Portugal. El país, que fue empeorando de manera exponencial en las últimas semanas a pesar de ser uno de los que más vacunas ha administrado en Europa, se está planteando volver a decretar el estado de emergenia. En los últimos días ya se había declarado la alerta roja en el territorio, y la vuelta de restricciones como el toque de queda en las regiones más afectadas.
La cepa Delta, antes conocida como ‘variante india’, es la predominante en el territorio luso con una frecuencia relativa del 89,1% en la última semana de la que se tienen datos (21 a 27 de junio), según datos del organismo público Instituto Nacional de Saúde Doutor Ricardo Jorge (INSA).
La frecuencia de los casos infectados con esta variante ha aumentado en todas las regiones durante el mes de junio, con un fuerte incremento que cabe destacar en las zonas del norte (de un 17,7% en la semana 22, a un 71,1% en la semana 25), las Regiones Autónomas de Madeira (con un aumento del 12,5% al 85,7%), y en las islas Azores, donde se pasó de no haber casos a finales de mayo, a que la variante Delta significase el 64,7% de los mismos en la última semana registrada.
¿Vuelta al estado de emergencia?
La situación de Portugal, que lleva días en alerta roja, preocupa a toda la sociedad y a la clase política. La ministra de Sanidad lusa, Marta Temido, no descartó la vuelta al estado de emergencia ante preguntas de la oposición este miércoles durante una reunión de la comisión de salud, y destacó que la estrategia actual del país es «la vacunación», según recogen medios locales.
«Reconocemos que las condiciones a las que hoy nos enfrentamos en términos epidemiológicos son distintas de aquellas que teníamos a principios de año«, ha señalado la ministra, para añadir que el país tiene «un proceso de vacunación que ha tenido buenos resultados y que ha permitido proteger a los portugueses con vacunas que son seguras y eficaces».
El país, en alerta roja y con toque de queda en las principales ciudades del país como Lisboa, Oporto, Braga o Faro, se enfrenta también a la presencia de otras cepas como la Alpha, asociada al Reino Unido y con una frecuencia en Portugal que ronda el 10%, seguidas de la Beta y Gamma, vinculadas al sur de África y a Brasil, respectivamente.