La oposición tumba los presupuestos de Santiago
PP, PSOE y BNG rechazan las cuentas propuestas por Compostela Aberta y critican con dureza la baja ejecución presupuestaria
Santiago llegará a 2019 con los presupuestos sin aprobar. El pleno extraordinario celebrado este sábado ha rechazado la propuesta del equipo de Martiño Noriega con los votos en contra de todas las fuerzas de la oposición, PP, PSOE y BNG. Compostela Aberta presentó unas cuentas de 115 millones de euros, que la edil de Economía, María Rozas, defendió como “los mejores de la historia de la ciudad”. En su alegato, defendió que eran unas cuentas “expansivas” con obras e inversiones fruto del «consenso» y con la apuesta en políticas sociales o el empleo, con inversiones en obras de hasta de 12 millones de euros, de los que 7 se correspondían con acuerdos plenarios y con una inversión de 111 euros por persona en ámbito social.
A pesar de que, a su juicio, los presupuestos servirían para que PSOE y BNG se sintieran “identificados”, ni uno ni otro grupo los respaldó. La oposición argumentó que no hubo una verdadera voluntad negociadora por parte de Compostela Aberta y achacaron al alcalde la baja ejecución de los presupuestos de este año para justificar la negativa. Noriega censuró que las fuerzas de la izquierda se alinearan con el PP debido al “clima preelectoral”.
BNG y PSOE piden más negociación
El pleno fue muy tenso, con intervenciones críticas de toda la oposición. Rubén Cela, portavoz del BNG, argumentó el voto en contra en la negativa «tajante» de Compostela Aberta a renegociar las ordenanzas fiscales y en la baja ejecución de los presupuestos, en torno al 20% este último año, así como en el crecimiento de las «subvenciones a dedo», en un «27,5% más» que en el último año del PP.
El PSOE, el otro grupo que apoyó los últimos presupuestos de la ciudad, reprochó al equipo de Gobierno que convocase «48 horas antes» el pleno y rechazó que se trate de un presupuesto social, aludiendo a la bajada de gasto en igualdad, juventud o fomento del empleo. «Estamos peor que el año pasado en ejecución y control», zanjó el portavoz Paco Reyes, que alerto de que los santiagueses pagarán más en 2019 de IBI ante la negativa de Compostela Aberta a «bajar el tipo impositivo».
El PP llama “incompetente” al alcalde
En el actual mandato, el PP ha ejercido una oposición frontal a prácticamente todas las iniciativas de Gobierno. No fue menos en el caso de los presupuestos, con el exconselleiro Agustín Hernández elevando mucho el tono y llegando a llamar “incompetente” al alcalde, Martiño Noriega.
«Estos presupuestos de 2019 son la constatación de que terminarán este periodo en este Ayuntamiento convirtiendo en papel mojado su programa», dijo el portavoz popular, que también reprochó a Compostela Aberta la baja ejecución, que cifró en un 6,85% con los datos de septiembre.
Noriega culpa al partidismo de PSOE y BNG
María Rozas respondió a BNG y PSdeG que la «ejecución» de los presupuestos es una problemática habitual no solo en Santiago desde hace años –incluidos anteriores mandatos– sino también en otras administraciones, como la de la Diputación de A Coruña, cogobernada por ambos partidos, y en la que se queda también en torno a un 20%.
Tras defender de nuevo que se trata de presupuestos «en clave de ciudad», recordó que incluyen acuerdos con el PSOE como las intervenciones de Quiroga Palacios o Belvís. En este punto, se dirigió a los socialistas, preguntado si «esto no merece al menos la abstención del PSOE», en una frase que el PP interpretó como una «súplica patética para su abstención».
El debate plenario, una vez confirmado que la oposición tumbaría la propuesta de presupuestos, lo cerró Martiño Noriega. El regidor defendió que «no hubo cambios en la voluntad de negociación» de Compostela Aberta pero sí «una menor disponibilidad de los socios preferentes para aprobar los presupuestos», BNG y PSOE, ante condicionantes como «el clima electoral».
«Los veo muy preocupados con la victimización», añadió, «les debería preocupar lo que opine la gente y corren tiempos de posicionarse, si uno está en una nueva etapa que acompañe a la ciudad» tras «el túnel del PP cuando aún no era Vox» o si «vive oculto en una melancolía del pasado».