La Generalitat pasa la presión a los directores de instituto

La Generalitat está pasando la presión de los alcaldes a los directores de centros escolares. Desde la Consejería de Enseñanza, que encabeza Clara Ponsatí, se les exige que entreguen las llaves de los centros para que se puedan instalar las urnas del referéndum. Muchos no acceden a sus pretensiones.

El gobierno de Carles Puigdemont intentará abrir el próximo 1 de octubre los mismos colegios electorales que se utilizan en las elecciones generales, autonómicas y municipales. La gran mayoría están situados en centros escolares. Así darían al referéndum una apariencia de normalidad. Por este motivo, desde los Servicios Territoriales de Enseñanza se está llamando en los últimos días a directores de centros para pedirles que cedan las llaves este 1 de octubre.

Algunos directores reciben llamadas desde los Servicios Territoriales de Enseñanza para pedirles las llaves. Otros han recibido incluso la visita de funcionarios de estos servicios por el mismo motivo. Fuentes de diversos centros escolares indican que una parte de los directores han accedido a dar las llaves por las buenas y que otros han reclamado que se les entregue una instrucción por escrito. Mientras no reciban esta instrucción, no cederán las llaves. Y de momento los responsables de Enseñanza evitan dar órdenes por escrito sobre el 1-O.

Repiten la estrategia del 9N

En la consulta independentista del 9 de noviembre de 2014 todas las instrucciones que se dieron a los directores de centros fueron verbales. Ahora la situación es distinta. Los directores se arriesgan a ser sancionados si ceden las llaves. “Como funcionarios debemos protegernos”, indica un director que ha recibido una llamada telefónica conminándole a entregar las llaves. Algunos aseguran sentirse presionados. Estos profesores prefieren mantenerse en el anonimato para evitar verse señalados.

Fuentes de Comisiones Obreras indican que están “verificando las informaciones” que les están llegando sobre presiones a directores de centros escolares. Manel Pulido, secretario general de la federación de CC.OO, aconseja a los directores de centros que sólo cedan las llaves si reciben instrucciones por escrito en las que conste la firma de un responsable político. En las mesas sectoriales programadas esta semana con dirigentes de Enseñanza se planteará esta cuestión. Los sindicatos catalanes del sector adoptan posiciones muy distintas sobre el referéndum.

Dirigentes que escurren el bulto

La Consejería de Enseñanza ni confirma ni desmiente que se estén dirigiendo a directores de centros para reclamarles las llaves para el 1-O. Desde sus servicios de prensa insisten en que del referéndum se ocupa la consejería de presidencia de Jordi Turull.

1-O: la Generalitat presiona a los directores de los centros escolares para que cedan las llaves

Ponsatí está al frente de Enseñanza desde la dimisión de Meritxell Ruiz el pasado julio. Esta no es la única que abandonó el barco. También se fue su número dos, Maria Jesús Mier, que fue sustituida por Lluís Baulenas. Precisamente, Baulenas dimitió la semana pasada como presidente del Consorcio de Educación de Barcelona, aunque se mantiene como secretario general de la Consejería. Del mencionado consorcio –participado por la Generalitat y el ayuntamiento de Ada Colau– depende una red de centros escolares de Barcelona que suelen ser utilizados como colegios electorales. El presidente del consorcio tiene potestad sobre las llaves. A muchos responsables estas llaves les están quemando.