Hablan los testigos: doce jóvenes participaron en la paliza mortal a Samuel
Dos testigos que auxiliaron a Samuel aseguran que vieron cómo un total de "12 latinos" de entre 20 y 30 años se escapaban de la escena del crimen del joven de 24 años
Un total de 12 personas de entre 20 y 30 años participaron en la paliza mortal que acabó con la vida de Samuel Luiz en la madrugada de este sábado en A Coruña. Así lo han asegurado dos testigos presenciales del asesinato del joven de 24 años en declaraciones a la prensa ofrecidas en la Avenida de Buenos Aires, donde se produjo el crimen.
Estos dos testigos llegaron al lugar alertados por «el ruido» que había y dieron auxilio a Samuel al verlo en el suelo. Según uno de los testigos, de la escena del crimen escaparon un total de «12 latinos» que, presuntamente, habían propinado una paliza mortal al joven coruñés.
Otro de los testigos ha afirmado que, al encontrarse el cuerpo de Samuel tendido el suelo, procedió a sacarle la lengua para evitar que se ahogara y lo puso «en posición de seguridad» mientras, en torno a las 3.00 de la mañana, llamaron al 061-Urxencias Sanitarias, que primero envió una ambulancia no medicalizada antes de desplazar a otra ya medicalizada. Tras su llegada, los sanitarios iniciaron las maniobras de reanimación, pero no pudieron hacer nada por salvarle la vida a Samuel, quien falleció en el Complexo Hospitalario Universitario da Coruña (Chuac).
Un total de 15 personas ya han declarado por el caso
Mientras tanto, se continúa con la investigación de este crimen por el que ya han declarado ante la Comisaría de A Coruña un total de 15 personas, aunque el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, no ha confirmado todavía si entre ellas había alguno de los autores de la agresión.
Además, otro de los puntos sobre los que gira la investigación es la posibilidad de que se trate de un crimen homófobo, lo que ha desatado una oleada de concentraciones multitudinarias por toda España. De hecho, la amiga que estaba con Samuel cuando ocurrió la agresión -iniciada, al parecer, por un malentendido con un teléfono móvil- afirma que los autores le llamaron «maricón» en varias ocasiones mientras le golpeaban.