Galicia ya aplica restricciones más duras que las pactadas con Illa
La Xunta aplica medidas propias de una situación de máximo riesgo, pero los criterios pactados con el Gobierno la sitúan como la más segura
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, pactó este jueves con las comunidades autónomas unos criterios comunes para evaluar el impacto del coronavirus en los distintos territorios y establecer unas medidas a adoptar en función del nivel de alerta. Fue el acuerdo más importante del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), que dejó en el aire la implantación de un toque de queda que se aplicará más pronto que tarde, pues la Xunta ya ha manifestado que está a favor de limitar la movilidad nocturna y varias comunidades, como Andalucía, Castilla y León o Comunidad Valenciana, incluso han iniciado las consultas jurídicas para tratar de establecer la medida por su cuenta.
Los criterios pactados con el Ministerio de Sanidad, en un documento denominado Actuaciones de respuesta coordinada para hacer frente a la pandemia por Covid-19, dejan a Galicia en una situación paradójica. Por un lado, es la comunidad más segura debido a la baja ocupación hospitalaria y en UCI. Por otro, ya está aplicando medidas especificadas para niveles de máximo riesgo, como la limitación de las reuniones a un máximo de cinco personas en el caso de no convivientes.
Medidas para atajar el virus
Esta restricción está recogida en el documento –de hecho, habla de limitación a seis personas– como adecuada para el nivel de alerta 3, el más alto. Para este grado de riesgo también se establece la limitación en velatorios, entierros y ceremonias fúnebres de 10 personas, exactamente la misma que aplica la Xunta. La coincidencia se repite, por ejemplo, en la limitación para el uso de instalaciones deportivas, aunque las medidas de la Xunta son menos restrictivas en el caso de los locales comerciales y la hostelería, Galicia –un 50% del aforo– pues se corresponderían con un nivel 2 de alerta.
Los criterios para la evaluación de riesgo del Covid-19 acordados este viernes todavía establecen un nivel más de alerta, el 4, que sería igual al tres per con medidas extraordinarias, como los cierres decretados por la Xunta en la provincia de Ourense o el mencionado toque de queda.
La ocupación hospitalaria, el factor clave
La situación de Galicia en base a los nuevos criterios pactados este jueves es mucho mejor a la de la media del Estado. Según los datos del Ministerio de Sanidad, la incidencia acumulada a 14 días es de 188,9, que se correspondería con un nivel alto, pero no el más elevado, que se sitúa a partir de los 250 casos.
Otro de los criterios es la positividad de las PCR, que en Galicia se ubica en los últimos días por encima del 6%. Sin embargo, se considera el nivel máximo de alerta a partir dl 15%, mientras que el porcentaje anterior correspondería a un nivel bajo de riesgo, si bien la Consellería de Sanidade ha insistido en que es el doble de lo deseable.
Solo las ciudades de Ourense y Santiago tienen indicadores de máximo riesgo debido a la incidencia del virus, que en la primera se sitúa en casos por cada 100.000 habitantes y a 14 días, mientras que en la capital gallega alcanza los casos.
Sin embargo, la baja ocupación hospitalaria mantiene a la comunidad entre las más seguras de España con los nuevos criterios en la mano. Los últimos datos del Ministerio de Sanidad indican que un 4,94% de las camas está ocupado por pacientes Covid-19 y un 7,43% de UCI. En ambos casos se trata de un nivel de alerta 2.
Es importante señalar que las medidas pactadas entre el Ministerio y las comunidades autónomas no impiden a los Gobiernos autonómicos aplicar sus propias restricciones. Y todo apunta que, al menos en Galicia, irán a más, pues la propia Consellería de Sanidade vaticinó un incremento de los casos en las próximas semanas.