Frenesí licitador: Botella contrata, antes y después del 24M, por 463 millones
Destacan la gestión del mobiliario urbano hasta 2030, el suministro en 'renting' de 333 vehículos para la Policía Municipal, un contrato informático y la venta de varias parcelas
La actividad licitadora en el Ayuntamiento de Madrid está siendo frenética. Antes y después de las elecciones, entre el 22 de mayo y el 5 de junio, el consistorio que preside en funciones Ana Botella ha licitado 30 contratos por un valor de 463 millones de euros.
Seguramente, la adjudicación de la mayoría de los contratos resulte necesaria para no alterar el normal funcionamiento de los servicios públicos. Pero otros, no. Sobre todo aquellos que implican un gasto presupuestario excesivo que, de consumarse, deberá ser asumido por los integrantes de la nueva corporación. Sean quienes sean. Eso sí, siempre que se adjudiquen antes de la llegada de los nuevos ediles, porque puede darse el caso de que alguna de estas convocatorias quede anulada.
Vehículos para la Policía Municipal
Entre esos contratos que podían haber esperado se encuentra la licitación para adjudicar, en régimen de ‘renting’, 333 vehículos para la Policía Municipal entre los años 2016 y 2020. A cambio del suministro de los vehículos, la empresa adjudicataria recibirá un canon mensual fijo, que comprende tanto el uso del vehículo como el mantenimiento y los seguros, por 28,6 millones de euros.
La situación de interinidad también ha sido aprovechada por la actual corporación municipal, presidida por Ana Botella, para vender cinco parcelas para uso residencial. En este caso, son 16 millones de euros los que el Ayuntamiento piensa ingresar.
Servicios informáticos y obras
Otros 9,5 millones de euros se han presupuestado para adjudicar el contrato de prestación de los servicios informáticos de la plataforma informática TIL de soporte a la gestión de ingresos del Ayuntamiento.
Tampoco parece que resultara muy urgente adjudicar, por 2,6 millones, los trabajos de control de calidad de las obras y actuaciones que lleven a cabo tanto el propio Ayuntamiento como las empresas de servicios o los particulares.
Contrato mollar: el mobiliario urbano
Y, como colofón a esta sucesión de licitaciones, un contrato mollar. El referido a la gestión del mobiliario urbano municipal, por un valor de 400 millones de euros, a ejecutar entre 2016 y 2030. Integra la gestión de varios elementos urbanos, como contenedores de pilas, baterías de móviles y de vidrio; los soportes que recogen la información y publicidad cultural, municipal, turística y de situación, o aseos públicos.
A cambio de la explotación de todos estos elementos, la empresa o empresas adjudicatarias deberán abonar al Ayuntamiento un canon fijo, por un total de casi 119 millones, y otro variable, de entre el 43% y el 50% sobre la facturación bruta anual, siempre que sea superior a 18,4 millones de euros.
Beneficio de 55 a 65 millones
El canon fijo se distribuye en el abono de 3.600 euros al año por cada cara publicitaria convencionales, 10.000 euros por cada cara publicitaria digital y 450 euros por cada campaña especial.
Teniendo en cuenta que, además, el adjudicatario tendrá que asumir el coste de conservación, mantenimiento y retirada de estos elementos urbanos, financiándolo mediante explotación publicitaria de los 5.112 metros cuadrados de espacio promocional con que cuentan estos soportes, el importe neto de beneficio estaría en un margen de entre 55 y 65 millones de euros durante los próximos 15 años.
La adjudicación o resolución de estos 30 contratos será, pues, una de las primeras decisiones que tenga que tomar el nuevo equipo de gobierno municipal que se forme en Madrid a partir del próximo 13 de junio.