Feijóo busca refugio en el bipartito ante la subida de peajes en la AP-9
El presidente de la Xunta alega que entre 2007 y 2009 las tarifas subieron un 8%, pero obvia el triple incremento de 2013, durante su mandato
La Xunta hilvana poco a poco su discurso sobre la subida de peajes de la AP-9, que será casi de un 4% a partir del próximo año. Feijóo echó la culpa del incremento al acuerdo del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, con José Blanco como ministro de Fomento, para compensar a la concesionaria Audasa por las obras de ampliación en Rande y Santiago.
El líder del PP gallego suma ahora al bipartito a los argumentos contra las críticas de la oposición, que este miércoles volvió a cargar contra su “irrelevancia” en el Estado y su “subordinación” al Gobierno de Rajoy, en palabras de Ana Pontón.
Incrementos en la etapa de Feijóo
Feijóo afirmó que los aumentos eran mayores durante la etapa del bipartito, de un 8% entre 2007 y 2009, y entonces “no había ningún kilómetro de obra que pagar”, zanjó el presidente de la Xunta. Frente a esto, alegó, las tarifas llevan dos años congeladas.
En realidad, durante el mandato de Feijóo los precios del peaje subieron más que ese 8%, a pesar de la estabilidad de los dos últimos ejercicios. Solamente durante el año 2013 se produjo una triple subida, del 3,29% en enero y del 7,5% en julio, a las que hubo que añadir el incremento del 3% en el IVA aplicado por el Gobierno de Mariano Rajoy ante la delicada situación económica de España. Al año siguiente, en 2014, los peajes se encarecieron un 1,85%.
Compensaciones pactadas por Blanco y Pastor
El próximo incremento, atribuido a las compensaciones firmadas por José Blanco por las obras de ampliación de capacidad, responde, según la concesionaria Audasa, a tres conceptos.
A la compensación de las obras se suma la actualización del IPC y una segunda compensación por los tramos bonificados en las áreas de Vigo y Pontevedra, un descuento que pactó Ana Pastor siguiendo una fórmula muy similar a la que siguió el Gobierno de Zapatero.
La transferencia de la AP-9, aparcada
En el trasfondo del debate sobre la AP-9 y el progresivo encarecimiento, especialmente lesivo para los usuarios durante la recesión económica, está la petición unánime del Parlamento gallego para que Fomento transfiera la titularidad del vial a la Xunta.
Esa demanda pudo haber sido la primera conquista de Feijóo en materia de competencias autonómicas durante sus tres mandatos. Sin embargo, el Ejecutivo de Rajoy rechazó en reiteradas ocasiones la petición. El presidente de la Xunta culpó en otras tantas ocasiones al proceso independentista catalán de dificultar la transferencia de la autopista.