Elecciones gallegas: ¿Una campaña sin Sánchez, Casado y Yolanda Díaz?
La crisis sanitaria por el Covid-19 puede derivar en una campaña electoral 100% gallega, sin la habitual visita de líderes estatales como Sánchez o Iglesias
¿Cómo se celebra una campaña electoral en tiempos de una crisis sanitaria? Es la pregunta que se hacen los grandes grupos políticos gallegos que concurrirán a las elecciones que, si la pandemia no lo impide, se celebrarán el próximo 12 de julio. Este lunes, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, anunció la fecha. Como era previsible, los comicios gallegos coincidirán con los vascos. Tanto el dirigente popular como el lehendakari Urkullu apuraron los tiempos al máximo y comunicaron la cita con las urnas con el tiempo justo para cumplir los mandatos de la ley electoral, que establece que entre la convocatoria y la celebración debe pasar un periodo de 54 días. Ambos dejaron claro lo que ya adelantó unos días antes el propio Fernando Simón, que la campaña «será distinta». No habrá grandes actos multitudinarios algo que implica que, muy seguramente, los grandes líderes estatales se queden donde están, en Madrid. El habitual desembarco de Pedro Sánchez, Pablo Iglesias, Pablo Casado o –incluso a pesar de su condición de gallega– Yolanda Díaz, torna complicado.
De momento, tan solo Antón Gómez Reino, candidato a la presidencia de la Xunta por Galicia En Común ha hablado sobre el tema. El pasado 29 de febrero, en las semanas previas al inicio de la campaña de las elecciones del 5 de abril, que nunca se produjeron por causa de la pandemia, tuvo lugar un multitudinario mitin en el auditorio coruñés de Palexco. Arropando al candidato se encontraba el secretario general de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, y la ministra de Trabajo, la gallega Yolanda Díaz. La foto podría no volver a repertirse, ya que el político coruñés descartó este martes mítines presenciales a los que acudan, de nuevo, los grandes líderes estatales de su formación.
¿Intervenciones por vídeoconferencia?
Los demás partidos de corte estatal, PSOE y PP, no se han manifestado aún al respecto. A preguntas de este medio explican que es pronto para tomar una determinación, aunque coinciden en que, en cualquier caso, la campaña será distinta a la que conocemos. «Todo va a depender, en buena medida, de cómo se desarrollen los acontecimientos, no sabemos qué movilidad estará permitida en territorio nacional en ese momento«, explican fuentes populares. «Sería hacer especulaciones, está claro que no habrá grandes actos, pero hay que ver cómo se pueden desarrollar, si encuentros sectoriales más pequeños, más actos al aire libre, intervenciones a través de vídeoconferencia», comentan.
¿La campaña electoral será más corta? Esta es una posibilidad a la que han aludido esta semana los líderes gallego y vasco, si bien, según explican fuentes de las formaciones políticas, no es tan sencillo acortar una campaña ya que, legalmente, el periodo establecido es de 15 días. «Cosa distinta es que se llegue a un acuerdo entre partidos, pero no se puede acortar por mandato legal. Si se tratase de una repetición electoral sería distinto, pero no es el caso, ya que en el decreto de suspensión de los comicios del 5 de abril se especifica que el próximo proceso ha de empezar de cero, como así ha sido», opinan.
Beneficio para Feijóo
Los partidos de la oposición convienen en que Feijóo busca esta situación. Acusan al presidente gallego de haber forzado una sobreexposición en los medios públicos gallegos durante toda la crisis del Covid-19 para reforzar su imagen. De momento, las últimas encuesta realizadas días antes de inicio de confinamiento acreditan que Feijóo ha salido reforzado de la crisis sanitaria, mejorando la intención de voto sobre el PPdeG que, según los mismos estudios, retendría la mayoría absoluta del Parlamento gallego.
Si bien la ausencia de líderes estatales en la campaña puede no ser un problema para los populares gallegos (Feijóo, que en numerosas ocasiones ha evidenciado su distancia con Pablo Casado, ha insistido una y otra vez desde inicio de año que se presenta a estas elecciones como un candidato libre que no es rehén de ninguna sigla), sí puede impactar en el caso del PSdeG y En Común. En primer lugar por el tirón que se le supone tanto al presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, como a los ministros de Unidas Podemos en el Ejecutivo. En segundo lugar, porque los candidatos gallegos de ambas formaciones, tanto Gonzalo Caballero como Gómez Reino, se presentan a los comicios autonómicos por primera vez y el electorado no tiene un grado de conocimiento tan amplio de ellos.
Debates y espacio en la CRTVG
De momento, tanto En Común como el BNG han dejado claro que la campaña debe estar marcada por debates electorales. Gómez Reino indicó este martes que es obligación de la Xunta garantizar que la oferta de todos los partidos llegue a todos los gallegos. En este sentido solicitó no sólo debates electorales, sino también encuentros sectoriales en los medios públicos gallegos.
Por su parte, la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón (líder de su formación desde 2016), propone varias medidas encaminadas a realizar una campaña «en la que se puedan contrastar las ideas de los distintos partidos políticos sin impedimentos por la crisis sanitaria del coronavirus». Por ello, ha lanzado la idea de hacer llegar a las casas toda la propaganda electoral en un único envío para ahorrar costes y ganar en garantías sanitarias.
Asimismo, ha pedido «neutralidad informativa», de forma que se lleven a cabo al menos «dos debates» en los medios públicos, entrevistas con los cabeza de lista de las provincias y aumentar el tiempo que destinan los medios públicos al seguimiento de la carrera hacia las urnas. En esta línea, también ha considerado «necesario» un mayor espacio para entrevistas en radio y televisión, al menos «dos por fuerza política y una cada semana de campaña».