El rey reivindica la «estabilidad política y la paz social» de la Constitución ante el empresariado catalán

Felipe VI proclama en presencia de Artur Mas que los retos del país se deben abordar "juntos, con el mismo espíritu de colaboración, cooperación y solidaridad"

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Felipe VI se ha rodeado de empresarios para lanzar su primer mensaje político en Cataluña tras su proclamación y tras el 9N. La ceremonia de entrega de los premios Ferrer Salat de la patronal Foment del Treball ha logrado este año un lleno hasta la bandera –240 invitados en la sala–, y el Rey no ha defraudado al auditorio.

Ante Artur Mas, el monarca ha recordado los grandes logros del país en los últimos decenios y ha reivindicado «la estabilidad política y la paz social, imprescindibles para la modernización de nuestro país, que nos ha proporcionado nuestro marco de convivencia constitucional».

Ha recordado que la Carta Magna, la misma que el PSOE y otras fuerzas políticas intentan reformar, es la que «ha hecho posible también el reconocimiento, la protección y el desarrollo de la diversidad cultural, territorial y política de toda España; y que tiene en el respeto al Estado de derecho la garantía para nuestra convivencia en libertad».

Unir fuerzas y estrategias

El Rey ha afirmado que la «sociedad demanda que los poderes públicos gestionen ante todo la resolución de la crisis económica; y especialmente que se siga luchando contra el desempleo». Su desacuerdo con el envite independentista de Mas no se ha quedado ahí: «Hoy más que nunca es necesario unir fuerzas y estrategias».

Y ante estos retos, no hay lugar para el proceso soberanista. «Todos somos necesarios, pues es cada vez más evidente que no podemos encontrar las respuestas de forma aislada; que son más imprescindibles que nunca las visiones compartidas que permitan respuestas conjuntas a desafíos globales, y que no podemos permitirnos el debilitamiento de la división porque el mundo camina hacia una mayor integración, como consecuencia de la interdependencia que define a nuestras sociedades y nuestras economías».

Tercera visita a Cataluña

Felipe VI ha recogido la medalla de oro de Foment del Treball en su tercera visita en Cataluña desde su proclamación, la segunda en menos de una semana. Fue el invitado estrella en la celebración del 50 aniversario del Seat Ibiza en la factoría de Martorell (Barcelona). Con todo, en esa ocasión el monarca no pronunció ningún discurso.

Ante la patronal también ha evocado a la figura de Juan Prim i Prats, «un catalán excepcional que vivió su intensa y extraordinaria vida guiado por un patriotismo irreductible que dedicó con generosidad a España entera». Su posición parece muy clara: «Estas premisas son las mismas que, desde el mejor espíritu de concordia fraternal, deben seguir guiando y guiarán los pasos de nuestro país».

Redistribución de la riqueza

Mas ha seguido atentamente las palabras del monarca desde la mesa presidencial de la entrega de premios. Sus palabras han precedido a las de Felipe VI en un mensaje muy moderado en el que ha exigido mejoras en el reparto de riqueza entre las comunidades autónomas.

«Si no se distribuye con equidad y sentido, crear riqueza sirve de bien poco», ha alertado el President, quien también se ha querido mostrar cercano a una de las organizaciones que más distancia ha tomado de su proceso nacionalista. «Soy consciente de la sensibilidad de organizaciones patronales como ésta y del objetivo de crear empleo y distribuir la riqueza en el país. En este objetivo social comulgamos todos».

Premios

Además del Rey, Foment del Treball ha entregado la medalla de honor de trayectoria empresarial al ex presidente del grupo Puig, Mariano Puig; ha nombrado al consejero delegado de Investindustrial Advisors (principal accionista de Port Aventura), Carlo Umberto Bonomi, empresario del año; y a las empresas Gaes, Girbau Group y Áreas por su trabajo. El empresario de futuro de esta edición de los galardones es Carlos Durán, fundador de Hoy-Voy.

Han asistido al acto desde el Fiscal Superior de Cataluña, José María Romero de Tejada, al vicepresidente de La Caixa Antonio Massanell. La lista también incluía al ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz; los consejeros de Empresa y Territori de la Generalitat, Felip Puig y Santi Vila, respectivamente; y empresarios como María Luisa Godia, Amancio López, Javier Faus, Antoni Esteve y Sebastià Salvador.

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