El PSOE gallego airea su guerra interna: “Feijóo estará encantado”

El ruido vuelve al PSOE gallego, partido abonado desde hace tiempo a las disputas internas y relegado en las dos últimas elecciones a tercera fuerza política en el Parlamento. Las dudas sobre el liderazgo de Gonzalo Caballero, instaladas también en Ferraz, afloran ante la expectativa de un congreso en el que el secretario xeral del PSdeG optará a renovar el liderazgo.

Sin embargo, la posibilidad de un relevo en el próximo congreso, incluso impulsado por el que fue el principal activo político de la candidatura de Gonzalo Caballero, Pedro Sánchez, ha vuelto a agitar las aguas en el socialismo gallego. Y las olas ya se perciben a simple vista.

Esta vez las desató el secretario de organización, José Antonio Quiroga, que en un artículo publicado en el diario El Progreso acusó al presidente de la Diputación de A Coruña, Valentín González Formoso, y al ex secretario xeral del partido, José Ramón Gómez Besteiro, de maniobrar para tomar el control del partido y “regresar al pasado”.

La columna de Quiroga mereció el reproche público del delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones. El ex alcalde de Ames, promocionado por Sánchez a su actual cargo, censuró el artículo en Facebook: “Desafortunadas palabras para un secretario de organización», comentó.

También el exalcalde de Fene, Iván Puentes, se sumó a las críticas, acusando a Quiroga de «menoscabar» y «menospreciar» a compañeros de partido. «Feijóo estará encantado», añadió el ahora concejal en Pontevedra.

Contra Besteiro, Formoso y las baronías

El relato de Quiroga señala a movimientos internos desde hace un año, cuando “algunos, pocos y ocultos, juegan a generar rumores y castillos en el aire”. El cargo socialista sitúa a González Formoso y a Gómez Besteiro como protagonistas de estas maniobras. Al primero lo acusa de seguir “coaligado” a la empresa térmica de su municipio (Endesa), «una de las más contaminantes de Europa». A Besteiro le recuerda que «tuvo que enfrentarse a los jueces por varios casos». «Lo que la derecha quiere: mochilas pesadas», concluye.

El artículo también carga contra las “baronías”, las “traiciones” y las “deslealtades”. En esta línea, señala que la «mejor muestra» de que el «retorno al pasado no es positivo» es lo que denomina la «mayor gestión política» de Besteiro al frente del partido: «Una operación de relevo en la Diputación de Lugo que acabó rompiendo el grupo de gobierno y entregando la Diputación al PP».

Quiroga termina reivindicado el camino emprendido por Gonzalo Caballero y apelando a que siga al frente del partido contando con «el apoyo y la lealtad de todos para seguir creciendo». «Porque queremos ver hacia el futuro y no regresos al pasado», concluye.