El PSC se quita los complejos y tirará de Felipe González y Pedro Sánchez en la campaña electoral
Iceta quiere contar con "los amigos del resto de España" para defender un proyecto conjunto de reforma y contrario a la independencia
Los contactos, los mensajes con la sociedad civil, los protagonizará Miquel Iceta, pero en los actos de campaña estarán presentes «los amigos del resto de España».
El primer secretario de los socialistas catalanes dejó claro este lunes que el 27S será determinante para el conjunto de España. Y, por ello, participarán en los actos de campaña Felipe González –criticado con fuerza por el independentismo tras su carta a los catalanes–; Pedro Sánchez –para reunir fuerzas de cara a las elecciones generales–, pero también los nuevos presidentes autonómicos socialistas como Ximo Puig, de Valencia o Francina Armengol, de Baleares.
Sánchez estará en siete días de la campaña, en el inicio, el día 11 de septiembre, y en el cierre, y en dos fines de semana. También en un acto de pre campaña, el 5 de septiembre en Tarragona. Felipe González lo hará, por lo menos, en una ocasión en los días centrales de la campaña, aunque los socialistas catalanes le han pedido su asistencia en otro acto central.
Apoyo a las tesis de Felipe
Iceta apoyó este lunes al ex presidente del Gobierno, que ha desatado una campaña en su contra tras su artículo en El País, en el que criticaba con fuerza a Artur Mas, por tratar de iniciar un proceso rupturista con el Estado español, cuando él mismo es el máximo representante en Cataluña. «Es el consejo de un buen amigo», señaló Iceta. «No les gusta que le lleven la contraria», añadió, en referencia a los enormes rechazos que ha suscitado González.
Los socialistas catalanes ya no temen esas críticas. Ahora se trata de un momento excepcional, en el que cada candidatura buscará maximizar sus resultados. El bloque soberanista se ha lanzado, con dureza, contra Felipe González, con la idea de reforzar un relato que parte de una premisa central: el proyecto independentista es democrático, y la ley debe someterse a un sentimiento mayoritario, si se produce.
Cohesión interna
Por ello, el reproche de González, al entender que lo primero que se debe respetar es la propia ley, sin romper con un estado democrático que es de todos –también de Cataluña– ha provocado urticaria en la candidatura de Junts pel Si, en la que figura Artur Mas de número cuatro.
A pocos días del inicio de la campaña, el debate se centra en la participación. Los socialistas entienden que una mayor participación, que supere el 68% o el 70%, puede beneficiar a los contrarios al proceso soberanista, pero esa supuesta regla de oro no siempre se cumple.
Una de las claves de la campaña será, según la propia candidatura de Junts pel Si, el mantenimiento de la cohesión interna, después del registro policial en la sede de la fundación de CDC, Catdem, y de la propia sede de CDC por las supuestas comisiones del 3% cobradas a través de la empresa Teyco, de la familia Sumarroca.
Esa cohesión se podrá comprobar este miércoles, en la comparecencia de Artur Mas en el Parlament. Toda la oposición le pedirá explicaciones, y también Esquerra Republicana, preocupada por las consecuencias electorales de los casos de corrupción de CDC.