El PP se enroca en su feudo: Castilla-León
Los apoyos de los populares caen en todas las comunidades, y necesitarán acuerdos para gobernar, salvo en el corazón de España
En España hay un lugar en el que no se tienen dudas. En Castilla-León el referente político es el PP. Y no se hable más. Pese a los problemas de corrupción, pese a la crisis económica, la comunidad ofrece toda su confianza al partido de Mariano Rajoy, al entender que gestiona con solvencia los problemas de sus vecinos. Fue José María Aznar quien llegó a la Moncloa después de presidir Castilla-León, y pasan los años y las mayorías absolutas se repiten. Es la única comunidad en la que el PP la mantendría, según la macroencuesta del CIS.
En Castilla-León, el PP obtendría entre 43 y 44 escaños, justo la mayoría absoluta. En 2011 logró 53, así que pierde algo de apoyo. El PSOE quedaría segundo, con 20 o 21 diputados. Y Podemos y Ciudadanos, entrarían en el parlamento autonómico con entre 8 y 10 diputados respectivamente.
En el resto de comunidades, el PP tiene problemas. Conseguiría ser la primera fuerza política en la mayoría de ellas, salvo en Asturias y Extremadura, donde el PSOE sería el partido ganador. Es en esos casos, en los que el PP buscará el apoyo de Ciudadanos.
Aragón, todas las combinaciones
En otros, sin embargo, la cosa se complica más. ¿Qué ocurrirá en Aragón? El PP lograría entre 23 y 24 escaños, cuando en 2011 obtuvo 30. El PSOE conseguiría 17; por 9 de Podemos; y entre 8 y 9 de Ciudadanos. Aparecen también el PAR, con cuatro escaños y el CHA, con dos.
El abanico es más amplio, y, por tanto, el gobierno de Aragón surgirá de una larga negociación. El PSOE no quiere renunciar a Ciudadanos, y tampoco lo quiere hacer el partido que dirige Albert Rivera.
Y es que el PP, en un momento de cambio político y con nuevos actores, sólo podría contar con un posible socio: Ciudadanos, teniendo en cuenta que se descarta una gran coalición con el PSOE. En cambio, los socialistas creen que podrán tender puentes tanto con Podemos como con Ciudadanos.