El gran cabreo de Xulio Ferreiro con Luis Villares
El alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, cree que la elección de la coordinadora de En Marea "rompe" el consenso y excluye "sensibilidades mayoritarias"
Cabreo. Y explícito. El alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, ha considerado este lunes que la elección de la coordinadora de En Marea «rompe una lista de consenso y confluencia», además de excluir «sensibilidades mayoritarias», aunque ha descartado una salida del partido instrumental de Marea Atlántica. Ferreiro ha asegurado que la elección de la coordinadora supone «un paso contrario» a los documentos suscritos en el encuentro celebrado en Vigo.
También ha manifestado que supone elegir una dirección, en la que Luís Villares se ha hecho con la portavocía dentro de una coordinadora conformada por 11 personas, «que no responde al proyecto político de En Marea tal y como fue concebido en su origen». «Deja fuera a sensibilidades importantísimas, diría mayoritarias», ha expuesto, aludiendo no solo a Marea Atlántica, sino también a Anova y Esquerda Unida, así como Ourense en Común.
El alcalde de A Coruña censura que «18 personas» cambien los documentos políticos que ganaron las primarias de En Marea
Con todo, preguntado a la salida de un acto si cree que esta decisión debe suponer la salida de Marea Atlántica, ha abogado por «trabajar dentro». También ha recordado que «el órgano de dirección política de En Marea no es la coordinadora ni el consello, es el plenario, y debe ser en el plenario donde se den las grandes discusiones y con el sentido mayoritario», ha sentenciado.
Pese a todo, ha cuestionado que «18 personas» (los miembros del Consello das Mareas que votaron, ya que el sector crítico no lo hizo) cambien «documentos políticos que ganan unas primarias y reciben un apoyo de cientos de personas». «En una organización sana y democrática no debería ocurrir», ha añadido.
Luís Villares recibió este fin de semana el apoyo de 18 miembros del Consello das Mareas, mientras que un total de 12 personas (los críticos con la nueva dirección) decidieron no votar porque entendían que en la reunión de este domingo se emprendió un camino para la construcción de una organización «diferente» a la diseñada en los acuerdos de Vigo y Compostela.