Covid-19: la Xunta dispara sus inspecciones a residencias
El Ejecutivo gallego realizará un total de 550 imspecciones en geriátricos en 2020, un 40% más que en 2019, ante la crisis desatada por el Covid-19
La Xunta de Galicia reforzará el control de las residencias tras convertirse en uno de los principales focos de contagio durante la crisis del coronavirus. Así lo ha asegurado el subdirector de Inspección de Servizos Sociais de la Xunta, Fernando González, en declaraciones a Europa Press, en las que ha revelado que el plan de inspección de la Xunta para 2020 contempla hacer 550 inspecciones, un 40% más que en 2019.
Entre sus objetivos está revisar el 65% de las residencias de mayores, el 35% de los centros de día de mayores y de las residencias de discapacidad, así como el 30% de centros de día de discapacidad para «asegurar que las residencias respeten escrupulosamente» a usuarios sin familia próxima.
“Hay que denunciar”
El subdirector de Inspección de Servicios Sociais de la Xunta ha hecho un llamamiento para que todo aquel que conozca posibles irregularidades en los centros geriátricos de la comunidad las traslade a las autoridades. “Hay que denunciar», ha recalcado, antes de pedir que estas quejas se formulen “con la mayor precisión y documentación posible».
«Se tramitan todas y siempre que es preciso se vaya al centro», ha asegurado Fernando González, que ha apuntado que “nunca se avisa» previamente a los centros y que, al margen de las visitas de oficio, gran parte de los expedientes iniciados surgen de denuncias, ya sea de familiares usuarios, personal o representantes de los trabajadores.
Respeto al patrimonio de usuarios
Así, la Xunta también contempla realizar campañas específicas para asegurar que las residencias «respeten escrupulosamente» el patrimonio de los usuarios que no tienen familia próxima.
Seguirá, al tiempo, «muy de cerca», que se «cumpla» el régimen de precios estipulado, para «evitar que se facture indebidamente por extras que las familias desconocen y que la Administración no permite»; o revisar la normativa de los centros de atención a mayores, un documento de 1996 que, 24 años después, admite la Xunta, conviene actualizar.
Además, para «agilizar la respuesta a las deficiencias», en 2020 la Xunta prevé habilitar un procedimiento que facilite que los usuarios puedan presentar directamente a la Xunta sus quejas y denuncias.