Cisma en Sanidade: dimite la número dos en Pontevedra tras el cese del gerente del Sergas
Sonia Fernández-Arruty ha presentado su dimisión como directora de Procesos Asistenciales tras hacerse público el nombramiento de José Flores como nuevo gerente del Área Sanitaria de Pontevedra - O Salnés
Más cambios en el Servizo Galego de Saúde (Sergas). Sonia Fernández-Arruty, número dos del Área Sanitaria de Pontevedra – O Salnés, ha presentado su dimisión como directora de Procesos Asistenciales después de haber sido anunciado públicamente el cese del gerente, José Ramón Gómez.
La Gerencia del Área Sanitaria pasará ahora a manos de José Flores, exgerente del Sergas, tras ser sustituido por la hasta ahora directora xeral de Planificación e Reforma Sanitaria de la Consellería de Sanidade, Estrella López-Pardo.
La noticia de la dimisión de la directora de Procesos Asistenciales ha sido confirmada por fuentes sindicales que enmarcan la polémica que ha rodeado toda la gestión de Fernández-Arruty durante los últimos meses.
Desde el pasado mes de julio también se encuentra vacante la Dirección de Recursos Humanos de esta Área Sanitaria después de la salida de su última titular, Yolanda Lesmes, para asumir la gerencia de la Universidade de Vigo.
Cese inmediato
El pasado 22 de julio, los sindicatos CESM Galicia, PROSAGAP, OMEGA, TSP y CO-BAS reclamaron una negociación a la Xunta para evitar una huelga en el Área Sanitaria de Pontevedra y exigieron el cese inmediato del equipo directivo encabezado por el gerente, la directora asistencial, el director de Enfermería, el director de Recursos Económicos y la directora de Atención Primaria.
Los representantes sindicales se han mostrado «satisfechos» con la destitución de José Ramón Gómez, en la que ven un «reconocimiento» a la situación «nefasta» que vive la sanidad en el área. «Entendemos así que la nefasta situación del área ha sido reconocida y asumida, por fin, por los máximos responsables del Sergas después de tantos meses de reivindicaciones», aseguran.
Los cinco sindicatos consideran que es una decisión que, «aunque llega con mucho retraso y supone un esfuerzo extraordinario del personal», supone «un paso decisivo para seguir avanzando en revertir la situación actual y recuperar la calidad asistencial que nunca se debió perder».
Esperan, con todo, poder reunirse con el nuevo equipo directivo para iniciar la elaboración de un plan funcional de emergencia, que incluya recursos materiales, económicos y humanos «suficientes» de todo tipo de personal «para recuperar la plantilla ideal y estable necesaria para garantizar una asistencia y una mejora notable de la situación tanto en atención primaria como en la hospitalaria»