¿Cambios en la Xunta? Núñez Feijóo tiene mes y medio para decidir
Los conselleiros comienzan a hablar: Ethel Vázquez, de Infraestructuras, se muestra "encantada, pero estaré donde me toque"
Continuidad o renovación. Ese será el pequeño dilema doméstico que tendrá que afrontar Núñez Feijóo en la Xunta. El presidente en funciones tendrá mes y medio, hasta que sea investido mandatario por cuarta vez en la Cámara autonómica y tome posesión de su cargo, para decidir si opta por la continuidad en su Ejecutivo o si aprovecha para introducir algún cambio, ya sea de carácter técnico o de mayor calado, con la creación de dos vicepresidencias.
Feijóo ha revalidado con amplitud una cuarta mayoría absoluta (será el voto emigrante el que ratifique si se queda en 41 o en 42 escaños, ya que está uno en liza en la provincia de Pontevedra, ahora mismo en manos del PSOE) que le deja las manos libres para configurar el nuevo Gobierno autonómico una vez que se constituya la Cámara.
Investidura a finales de agosto
La sesión constitutiva del nuevo Parlamento tendrá lugar el 7 de agosto y la previsión con la que se trabaja en el entorno de Feijóo es la de acortar los plazos al máximo. No en vano, uno de los «mensajes fuerza» del candidato popular durante la campaña ha sido el que no se desviaría de la gestión ni dejaría de trabajar, aunque en funciones, al frente de la Xunta.
Bajo esta premisa, la última semana de agosto aparece marcada en rojo en el calendario, ya que es la primera en la que, agilizando todos los pasos previos, se podría celebrar la investidura y toma de posesión del nuevo presidente. Si sigue el guión de mandatos previos, la designación de su nuevo Gobierno la efectuaría de inmediato, probablemente el mismo domingo de esa semana.
¿Retoques a la continuidad?
Antes, tras la constitución del Parlamento el día 7 de agosto, hay que seguir una serie de pasos formales. Y es que, a los 15 días como máximo, se celebrará la apertura solemne de la Cámara. Entre tanto, también se tienen que constituir los grupos parlamentarios y hay de plazo diez días para las comisiones de la cámara.
Estos pasos formales sitúan el nuevo Gobierno en plenitud de funciones en torno al 31 de agosto y dan a Feijóo, amigo de medir los tiempos y no acelerar ninguna decisión, un plazo de alrededor de mes y medio para determinar quién va a formar parte de su nuevo equipo. Al respecto, la mayor parte de dirigentes del PPdeG consultados auguran que primará la continuidad.
«Es el equipo que ha gestionado la pandemia y ha sido revalidado por las urnas«, ha argumentado una de las fuentes consultadas. Sin embargo, la opción de que aproveche para hacer algún «ajuste» tampoco está descartada y la mayor parte de dirigentes lo ven más que factible.
El debate sucesorio, aparcado
En un contexto en el que el debate sucesorio está silenciado, cualquier cambio de calado en el Ejecutivo podría dar alguna pista que el presidente gallego aún no desea poner en primer plano. Más allá, los suyos defienden que Feijóo no está ahora mismo «pensando a nivel orgánico«, sino que su prioridad es enfrentar la pandemia y sus consecuencias económicas y sociales.
Por este motivo, aunque los populares gallegos tienen pendiente de celebrar un congreso, lo previsible es que no se apuren a ponerle fecha. En ello se podría empezar a pensar ya en otoño.
En cuanto a las cuotas provinciales, después de unos comicios en los que Lugo, con Elena Candia al frente de sus filas, y A Coruña, con los populares dirigidos por Diego Calvo, registran unos resultados muy destacables, las fuentes consultadas entienden que su visión no ha cambiado: el de Os Peares, que siempre ha rechazado las cuotas de plano, formará su Gobierno «con las manos libres».
Ethel Vázquez: «Donde me toque»
Mientras Feijóo adopta su decisión, para lo que tiene margen, han empezado ya las preguntas públicas a los conselleiros en relación a su continuidad. Este martes tocó el turno a la responsable de Infraestruturas e Mobilidade en funciones, Ethel Vázquez, quien ha destacado el «trabajo intenso» realizado por este departamento del Gobierno gallego, pero ha reconocido que su continuidad al frente del mismo es una «decisión del presidente». Así lo ha manifestado durante una visita a las obras de mejora del Camino Inglés a su paso por el Polígono do Tambre, en Santiago.
«Esas son decisiones del presidente. Yo estaré donde me toque«, ha respondido, para seguidamente defender el «mucho» trabajo realizado: «Lo hicimos con ilusión, con ganas y anteponiendo sobre todo a los gallegos primero». «Por supuesto, encantada de seguir trabajando donde nos gusta. A mí me piden los alcaldes muchas cosas y yo soy feliz licitando, adjudicando y haciendo obras. Sobre todo porque es lo que sabemos y lo que nos enseñaron en la escuela, pero estaré donde toque y aportando donde pueda aportar», ha finalizado.