Calviño, el aliado inesperado de Alcoa
La vicepresidenta económica dice que la industria electrointensiva "no puede parar", aunque pide un nivel bajo de actividad
Un aliado inesperado para Alcoa. La vicepresidenta de Asuntos Económicos y Transformación Digital, la coruñesa Nadia Calviño, ha asegurado que la industria electrointensiva, por sus características y relevancia, es una de las que no puede parar su actividad al completo, por lo que ha solicitado a las empresas que garanticen el nivel operativo mínimo.
Tras el Consejo de Ministros, Calviño ha asegurado que, tras la aprobación del real decreto ley del pasado domingo con la limitación de la movilidad a los sectores no esenciales para luchar contra el coronavirus, son ahora las empresas las que tienen que determinar cuáles son los servicios «esenciales o mínimos» que son imprescindibles para garantizar que la actividad se puede recortar durante estos siete días y que se podrá reactivar fácilmente después.
Las electrointensivas no pueden parar
«La industria electrointensiva es, por supuesto, una de las que no se puede parar, al igual que ocurre en otros ámbitos industriales de España, por lo que tenemos que asegurarnos de que se puede mantener ese nivel de actividad más reducido con un mínimo de movilidad por parte de los trabajadores», explicó. Alcoa, con planta en San Cibrao, es uno de los grandes consumidores de energía de España. La multinacional norteamericana es una de las que mantienen su actividad en Galicia, no así Megasa, otra electrointensiva, que ha decido parar la producción.
Sin embargo, la titular de la cartera de Asuntos Económicos destacó que no se trata de establecer categorías de empresas o actividades, sino de que cada compañía con sus trabajadores tiene que ver cuál es la mejor forma de organizarse durante este período de siete días laborales para poder estar con un mínimo de movilidad.
Evitar peores daños, «más profundos»
«Creo que las empresas son las primeras interesadas en la salud de sus trabajadores y en reducir la extensión del virus y evitar lo máximo posible el contagio, subrayó, al tiempo que se mostró confiada en se podrá llegar a un acuerdo y a una organización del trabajo que permitan lograr estos objetivos comunes, evitando la pérdida de clientes y un daño «más profundo, duradero e irreparable en este período reducido de días».
Por ello, no se mostró a favor de modificar el real decreto aprobado el pasado domingo, puesto que en él ya están incluida la flexibilidad necesaria y la cobertura legal para los trabajadores que tengan que desplazarse. «Con esto hemos dado suficiente claridad y son ahora las empresas, con sus trabajadores, las que tienen que ver cómo organizarse mejor para contribuir a este objetivo común de frenar la expansión del virus en el país», finalizó.
Servicios ininterrumpibles
El Real Decreto Ley aprobado este martes como un paquete de medidas complementarias para hacer frente al coronavirus, recoge que, «excepcionalmente», mientras esté en vigor el estado de alarma, no podrá suspenderse el suministro de estos servicios energéticos (electricidad, gas natural, derivados del petróleo) y de agua, considerados básicos, a los consumidores «en su vivienda habitual», aunque exista esa posibilidad en los contratos de suministro.
El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un paquete de medidas en materia de alquiler que contempla la suspensión de los desahucios seis meses tras el fin del estado de alarma, la prórroga extraordinaria de seis meses de los contratos de alquiler de vivienda habitual para evitar subidas abusivas, una línea de microcréditos avalados por el Estado o ayudas directas de hasta 900 euros tras la crisis, entre otros.