AP-9: Vox rechaza la transferencia para no favorecer “el nacionalismo” de Feijóo
Los principales grupos del Congreso de los diputados, con la excepción de Vox, apoyan la toma en consideración de la propuesta del Parlamento gallego
Nuevo episodio sobre la vieja reivindicación de la transferencia de la Autopista del Atlántico a la administración gallega. Este martes, los principales grupos del Congreso, salvo Vox, han apoyado la toma en consideración de la proposición de ley del Parlamento gallego para traspasar a la Xunta la titularidad y competencias de la AP-9. El texto ha contado con el respaldo de los representantes de las distintas fuerzas a excepción de los 51 votos emitidos por los de Santiago Abascal.
La propuesta de ley, a la que ahora los grupos del Congreso podrán presentar enmiendas, plantea la transferencia a Galicia de la titularidad y las competencias sobre el régimen de concesión y las funciones y servicios hasta ahora ejercidas por la administración central.
En su defensa de la iniciativa, el secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, ha subrayado la necesidad de rebajar los «inadmisibles» peajes que los gallegos pagan cada vez que usan la AP-9, lo que, a su juicio, supone «un auténtico expolio» para los gallegos que es prioritario «aliviar». Pero también ha urgido a que el Estado transfiera esta infraestructura tan importante para Galicia como ya ha hecho con otras autopistas de comunidades autónomas, como Cataluña o País Vasco.
La misma demanda ha hecho la líder del BNG, Ana Pontón, quien cree que el traspaso de la gestión de la AP-9 es «el primer paso» para acabar con una «discriminación histórica» con Galicia que lastra la economía de sus ciudadanos, que cada día son víctimas de «una estafa legalizada». Ha aprovechado, además, para reprochar al Gobierno que no esté cumpliendo con el acuerdo de investidura suscrito con el BNG y que recogía una bajada «histórica» de los peajes de esa autopista.
Por el PP, el vicepresidente primero del Parlamento gallego, Diego Calvo, ha añadido que los gallegos no piden nada que no se haya hecho antes ni que atente contra el orden constitucional establecido, sino que sólo aspiran a gestionar una infraestructura básica para la comunidad. «Hoy pedimos la transferencia de la AP-9 con ánimo de unir, y no separar», indicó.
Vox y las “taifas autonómicas”
Durante el debate parlamentario, únicamente Vox se ha mostrado en contra de la tramitación del traspaso por rechazar «el aumento constante de poder de las taifas autonómicas», pero también ante el riesgo de que la rebaja de peajes que impulse la Xunta, ha dicho su diputado Francisco José Contreras, sea asumido en forma de consecuencias contractuales por la Administración General.
Unas dudas también planteadas por Ciudadanos, que tras abstenerse en la última votación de esta ley –que decayó ante la convocatoria de las elecciones generales–, ha decidido ahora apoyar su toma en consideración. Su diputada María Muñoz ha advertido de que el traspaso no implica por sí solo ni la rebaja de peajes, ni el rescate de la concesión ni la reducción del coste operativo de la infraestructura, cuestiones que podrían abordarse sin la transferencia.
“No favoreceremos el ‘nacionalismo’ de Feijóo
El representante de Vox en el debate, por su parte, ha añadido que la formación que dirige Santiago Abascal no «favorecerá» el «nacionalismo» del presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, «con más concesiones».
Por su parte, tanto Galicia en Común como el BNG han reivindicado la gestión pública de la autopista y su circulación «libre de peajes», recordando además que, de cumplirse la concesión, esta se alargará hasta más allá de los 75 años.
Para Nestor Rego (BNG), esta autopista supone «una fechoría, un expolio y una discriminación», mientras que Antón Gómez-Reino (Galicia en Común) ha asegurado que las vías de peaje «van a ser una anomalía en el Estado».
PP y PSOE se enzarzan por Audasa
El PP ha lamentado «los peajes desorbitados» mantenidos por la concesionaria, Audasa, con la subida más alta entre las únicas vías que han encarecido sus tarifas, tal y como ha recordado su diputado Celso Delgado, que ha defendido una «gestión directa» de esta infraestructura.
Sin embargo, Guillermo Meijón Couselo, del PSOE, ha recordado que fue un Gobierno ‘popular’ el que amplió hasta 2048 una concesión que, en caso contrario, estaría a dos años de caducar, y ha reivindicado las partidas de los nuevos Presupuestos para financiar la rebaja en los peajes de esta vía. Ante las críticas de otras formaciones por la aplicación de la gratuidad en tramos de la autopista, como el comprendido entre Vigo y Redondela, ha justificado que «no es algo que se pueda hacer de la noche a la mañana».