Anécdotas del 28-M: de los descuidos con la documentación a la visita de una cabra
La jornada transcurre con “absoluta normalidad”, según Delegación del Gobierno, salvo las situaciones "anecdóticas y habituales" de este tipo de procesos
Una jornada electoral que transcurre con «absoluta normalidad». Así se está desarrollando este 28 de mayo en Galicia en el que se han vivido las situaciones «anecdóticas y habituales» de este tipo de procesos, tal y como apuntaba la propia Delegación del Gobierno.
La anécdota más original en lo que va de jornada de votación ha sido la visita inesperada que han tenido los miembros del colegio electoral de Setecoros, en Valga (Pontevedra), donde se ha colado –hasta en dos ocasiones– una cabra.
Constitución de las mesas
El 100% de las mesas electorales quedaba constituido a las 9,36 horas –sin contabilizarse mesas suspendidas–. Se alcanzaba el total algo más tarde de lo previsto por una mesa en el Colegio Emilia Pardo Bazán, en el Ayuntamiento de A Coruña, debido a la falta de personal. Dado el retraso, se ampliará su horario de votación hasta 36 minutos después de las ocho de la tarde.
En esta misma ciudad, dos mesas en el Palacio de la Ópera sufrieron retrasos por la ausencia de los miembros de las mesas. En Pontevedra, en Vigo, una de las mesas ubicadas en el CEIP Pombal-Lavadores también se retrasó por el mismo motivo.
En la ciudad de Ourense se completó una de las mesas electorales con el primer votante de la jornada. En todos estos casos, la normativa electoral indica que la votación se extiende en igual cuantía de tiempo que el retraso que acumuló la constitución de la mesa.
En el extremo opuesto está una mesa del Colegio de Riomol, en Castroverde (Lugo), la primera constituida ha sido la mesa del Colegio de Riomol, cuando pasaban 1 minuto y 23 segundos de las ocho de la mañana. Le siguió tres segundos después la mesa del Grupo Escolar de Codeseda, en el Ayuntamiento de A Estrada (Pontevedra). Lugo fue también la primera provincia en tener constituidas sus 534 mesas electorales.
Descuidos
Entre los gallegos más madrugadores para depositar su voto en las urnas ha estado el candidato del BNG a la alcaldía de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, que ha votado a las 9,30 horas en el colegio electoral en la parroquia de Marcón.
Cuando ha llegado allí, se ha dado cuenta de que no llevaba consigo el DNI, que se había olvidado en el coche. Finalmente ha podido depositar la papeleta tras volver al vehículo a coger la documentación.
El alcaldable del PPdeG por Ourense, Manuel Cabezas, también ha protagonizado una anécdota electoral al acudir a votar a una mesa que no era la que le correspondía.
Aunque el popular tenía previsto ejercer su derecho a voto en el Edificio de La Molinera, al llegar a la mesa se comprobó que no era el lugar que le correspondía, sino que su colegio electoral era la delegación de la Consellería de Sanidade en Ourense, donde sí ha podido votar.
Muchos de los candidatos han acudido acompañados a votar. Ha sido el caso del candidato socialista a la alcaldía de Vigo, Abel Caballero, que ha estado acompañado por su mujer; o la alcaldable socialista por Lugo, Lara Méndez, y el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, que han votado acompañados de sus familias.