Aliados de Podemos atribuyen a Amancio Ortega sicavs que no tiene
El alcalde de Ferrol pide al fundador de Inditex que "no se esconda bajo fórmulas artificiales, como son las sicav", aunque hace años que no tiene ninguna
El candidato de Ferrol en Común a la Alcaldía, Jorge Suárez, ha entrado en el debate abierto por Podemos respecto a las donaciones a la sanidad pública de Amancio Ortega. El regidor se alineó con la formación de Pablo Iglesias, que acudirá a Ferrol a darle su apoyo durante la gira electoral por Galicia, y se mostró en contra de la aportación del fundador de Inditex.
Suárez abogó por «cambiar el modelo» con el fin de que el Estado financie este servicio público con los tributos que recaude de las empresas de Ortega y que «no se esconda bajo fórmulas artificiales, como son las sicavs».
En realidad, el empresario hace años que no tiene operativa ninguna sociedad de inversión de capital variable conocida. En 2011 cerró las tres sicavs que tenía, Keblar, Alazán y Gramela. La financiación de su fundación procede de su brazo inversor Pontegadea, donde ingresa la mayor parte de los dividendos de Inditex.
Tiempo atrás también Yolanda Díaz había atribuido a Ortega la titularidad de sicavs, que sí tienen personas vinculadas al fundador de Inditex, como su hija Sandra Ortega (Soandres); su sobrina Dolores Ortega, esposa del ex director general de Inditex, Juan Carlos Rodríguez Cebrián (Silleiro, Vivero y Río Nora); o su hermana, Josefa Ortega (Jogami y Escaribel).
“No contribuyen como deberían”
El regidor ferrolano insistió en que «Amancio Ortega y sus empresas deberían tributar como cualquier ciudadano, no tener beneficios fiscales», pues entiende que sus compañías «tienen ya suficientes beneficios». «Que paguen igual que hacemos el resto de ciudadanos cuando presentamos nuestra declaración de la renta», reclamó Jorge Suárez.
El alcalde insistió en que «por mucha donación o caridad en sentido antiguo que hagan, seguirán siendo las fortunas más millonarias del mundo, no solo por el mérito empresarial, sino porque no contribuyen a una sanidad y educación pública como deberían».