Alerta por sequía: nuevas restricciones en Carballo, Ribadavia y cinco concellos de la cuenca del Lérez
Los vecinos de Ribadavia disponen de cinco horas de suministro al día mientras que en Carballo se establecen nuevas medidas sobre los servicios públicos, como surprimir los baldeos o cerrar todas las fuentes ornamentales
La sequía persistente de los últimos meses y las desfavorables previsiones meteorológicas para las próximas semanas, ha provocado que distintos municipos de la comunidad se vean obligados a intensificar las restricciones de agua. Ribadavia, Carballo y concellos de la cuenca del Lérez (Pontevedra), por ejemplo, han tenido que aplicar nuevas restricciones para hacer frente a la escasez.
El Ayuntamiento de Carballo (A Coruña) ha puesto en marcha las primeras medidas para reducir el consumo de agua tras una reunión con Augas de Galicia. En concreto, establecerá restricciones en los servicios públicos, además de solicitar la colaboración ciudadana para evitar que la situación de prealerta «se agrave».
Augas de Galicia ha confirmado en un comunicado que «la sequía persistente de los últimos meses y las previsiones meteorológicas para lo que queda de mes auguran un verano complicado en la cuenca fluvial del Anllóns».
El ayuntamiento de Carballo ha elaborado un plan municipal de emergencias contra la sequía, que se encuentra en tramitación, que «para la fase de prealerta no establece restricciones sino recomendaciones».
A pesar de ello, han acordado establecer una serie de restricciones que, por el momento, solo afectarán a los servicios públicos. Entre ellos está eliminar baldeos excepto por causa justificada; cerrar todas las fuentes ornamentales; intentar reducir al máximo los consumos municipales y limitar los riegos de las zonas verdes, que se harán en días alternos y reduciendo el tiempo.
También colocará en las duchas de las playas carteles informativos para que las personas usuarias procuren abrir el agua el mínimo tiempo posible, además de trasladar a la población una serie de consejos básicos.
Corte de suministro en Ribadavia
El municipio ourensano de Ribadavia llevó a cabo a lo largo de este fin de semana cortes en el suministro de agua ante su falta en el depósito. Este lunes, a pesar de que el gobierno local ha trasladado que la situación «sigue siendo mala», se ha habilitado un periodo de cinco horas para el empleo de este recurso.
Desde la madrugada del jueves al viernes, este ayuntamiento con 5.000 habitantes tenía cortes de agua por la noche, entre las 23,00 y las 07,00 horas, ante una situación que el gobierno local calificaba de «crítica y dramática».
A esta situación se llegó por el escaso caudal del regato Maquiáns, que nutre el depósito para el abastecimiento y que ha comprometido el suministro al encontrarse prácticamente seco. Por ello, el Gobierno local se vio obligado a imponer restricciones nocturnas y a instar a hacer un consumo responsable.
Durante el fin de semana la situación fue «crítica». A algunos vecinos se les repartió agua embotellada desde la sede de la empresa concesionaria, Aqualia. El servicio municipal de emergencias efectuó entrega de botellas y garrafas a domicilio a los afectados dependientes, con movilidad reducida y aquellos que no podían desplazarse.
Cuenca del Lérez
Gonzalo Mosqueira, gerente de Augas de Galicia, ha mantenido este lunes un encuentro telemático con representantes de los municipios de Pontevedra, Sanxenxo, Marín, Poio y Bueu para trasladar información sobre cómo evoluciona la situación de prealerta por escasez de agua.
Según ha explicado la situación del caudal medio del río «se mantiene estable» en los últimos días, situándose en torno el 1,68 m3/s, siendo los datos del consumo total a día de hoy de 0,51 m3/s. Y ha precisado que los datos de los caudales totales consumidos muestran el esfuerzo que están desarrollando los distintos ayuntamientos para reducir los consumos, aunque en el caso de Pontevedra hay un repunte en los últimos días.
El gerente de Augas de Galicia reiteró que, dado que aún está comenzando el mes de agosto, es preciso hacer un consumo responsable del agua, evitando usos innecesarios, para garantizar el abastecimiento y el mantenimiento del caudal ecológico.
Así, la Xunta insta a los ayuntamientos a seguir incidiendo en las medidas de ahorro ya adoptadas e implementado otras nuevas, como por ejemplo el Ayuntamiento de Sanxenxo, que cerró la piscina municipal para tratar de salvar la época estival con las garantías de las reservas de agua.
En paralelo, la Xunta destaca en un comunicado que continúa avanzando «en soluciones alternativas» para asegurar las aportaciones al caudal del Lérez, que abastece a Pontevedra, Marín, Poio, Sanxenxo y Bueu.
Augas de Galicia estudió la semana pasada mediante drones las características del agua del hueco minero de Ventoxo, en Forcarei, con el fin de evaluar se cumple los requisitos para hacer aportaciones al río Lérez.
El organismo hidráulico está a la espera de disponer de los resultados definitivos de estas analíticas para confirmar si el agua embalsada tiene la calidad necesaria para consumo humano y si es compatible con la vida del río.
En caso de que las analíticas sean favorables, Augas de Galicia procederá a hacer una obra de emergencia para trasvasar el agua desde el hueco minero hacia el Ventoxo, afluente del Lérez, para aportar caudal a este río.